De manera inesperada, el hasta ahora ministro de Hacienda, Mario Marcel, renunció a su cargo argumentando «motivos personales». Su lugar fue ocupado por el exministro de Economía, Nicolás Grau, quien ahora deberá hacer frente a una serie de desafíos clave en los últimos meses del Gobierno del presidente Gabriel Boric.
Con apenas siete meses restantes del mandato de Boric, Grau, de 42 años y doctor en Economía por la Universidad de Pensilvania, tendrá que liderar la elaboración del Presupuesto 2026, una tarea que su antecesor Marcel había dejado pendiente. Además, deberá impulsar la reforma tributaria para las pequeñas y medianas empresas (Pymes) y diseñar el nuevo mecanismo de financiamiento de la educación superior, tras la reciente aprobación de la reforma que busca acabar con el CAE.
Compromiso con la responsabilidad fiscal
En su discurso de asunción, Grau reafirmó el compromiso del Gobierno con la responsabilidad fiscal, señalando que «esas reglas trascienden los ciclos políticos y dan estabilidad de largo plazo al país». Boric, por su parte, agradeció «el rigor, la tenacidad y la seriedad» de Marcel, cuya gestión, dijo, ha dejado «la situación fiscal hoy mejor que la que teníamos cuando asumimos el Gobierno».
Destrabar las inversiones
Otro de los retos que enfrentará Grau será la aplicación del proyecto de permisos sectoriales, que impulsó cuando era ministro de Economía y que, tras una serie de discrepancias, logró avanzar en el Congreso. Su correcta implementación será fundamental para destrabar las inversiones en el país.
El mundo empresarial ha mostrado «toda disposición» para trabajar con Grau en su nuevo cargo, reconociendo su «destacado desempeño» al frente del Ministerio de Economía. Ahora, el nuevo ministro de Hacienda deberá demostrar su capacidad para navegar los desafíos económicos y fiscales que se avecinan en los últimos meses del Gobierno de Boric.