Los vecinos del Estadio Monumental han dado un paso decisivo al presentar un recurso de protección contra Blanco y Negro (ByN), la empresa que administra a Colo Colo, denunciando «inseguridad e insalubridad» en la zona. Sin embargo, una maniobra de ByN ha logrado aplazar por una semana la audiencia que debía celebrarse este jueves.
Según el documento oficial al que tuvo acceso BioBioChile, ByN recusó a una de las juezas de la Corte de Apelaciones, argumentando que no expresaba causa. Esto provocó que la vista de la causa, que estaba programada en cuarto lugar para el 14 de agosto, se haya reprogramado ahora para el jueves 21 de agosto.
Las principales acusaciones de los vecinos incluyen riñas, fuegos artificiales, desechos y excrementos en las calles, así como una total falta de medidas por parte de Blanco y Negro para abordar la limpieza, seguridad y control de incivilidades. Los residentes exigen que ByN se haga responsable de estas situaciones, que se producen especialmente cuando juega Colo Colo.
La Posición de Blanco y Negro
Por su parte, Blanco y Negro considera el petitorio de los vecinos «abiertamente desproporcionado». En su respuesta escrita, la concesionaria argumenta que los hechos denunciados «no quedan bajo el control de Blanco y Negro», ya que se trata de «perpetración de actos de violencia en la vía pública, comisión de delitos contra la propiedad y contra las personas fuera del Estadio, existencia de comercio ilegal, ingesta de alcohol y realización de necesidades fisiológicas en las calles y antejardines de la comunidad, y uso de fuegos artificiales».
Finalmente, Blanco y Negro aseguró que «todos los hechos relatados versan sobre desórdenes al orden público, de forma que quedan sujetos al actuar del Estado y no de privados».
Un Conflicto Pendiente de Resolución
La audiencia reprogramada para el 21 de agosto será clave para determinar si Blanco y Negro debe asumir responsabilidad por la inseguridad e insalubridad que afecta a los vecinos del Estadio Monumental. Los residentes buscan que la empresa administradora de Colo Colo tome medidas concretas para mejorar la calidad de vida en la zona, mientras que ByN insiste en que estos problemas escapan a su control.
El resultado de este conflicto tendrá importantes implicaciones no solo para la relación entre la comunidad y el club, sino también para la responsabilidad que deben asumir las empresas privadas en la gestión de los espacios públicos adyacentes a sus instalaciones.