En medio de una creciente crisis humanitaria en la Franja de Gaza, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han reanudado el lanzamiento aéreo de ayuda a la región. Este movimiento se produce tras advertencias del Gobierno gazatí sobre el riesgo de que más de 100.000 niños mueran por malnutrición si no se reciben suministros de leche de fórmula y complementos nutricionales en los próximos días.
Según las FDI, el lanzamiento aéreo se realizó «de acuerdo con las directrices de la cúpula política» y en coordinación con organizaciones internacionales, liderado por el COGAT (organismo israelí que gestiona los asuntos civiles). El envío incluyó siete paquetes con harina, azúcar y alimentos enlatados.
Esfuerzos por Facilitar el Ingreso de Ayuda
Las FDI han indicado que establecerán «corredores humanitarios designados» para «facilitar el movimiento seguro de los convoyes de la ONU que entregan alimentos y medicamentos a la población» de Gaza. Esta medida llega después de que las agencias de la ONU, encargadas hasta entonces del reparto de ayuda, fueran relegadas a un segundo plano con la llegada de la polémica Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), respaldada por Estados Unidos.
Según informes, en los complejos militarizados de la GHF han muerto más de mil personas mientras esperaban en largas colas para recibir asistencia. La decisión de Israel de reanudar los lanzamientos aéreos se produce en un momento en que las muertes por desnutrición, especialmente entre niños y bebés, se han disparado en las últimas semanas.
Interceptación del Barco Handala
El lanzamiento de ayuda se produjo poco después de que la coalición propalestina Flotilla de la Libertad denunciara que el Ejército de Israel interceptó su barco Handala mientras navegaba hacia Gaza con el objetivo de romper el bloqueo israelí y entregar ayuda humanitaria. Según la organización, la interceptación fue «violenta» y ocurrió a 40 millas náuticas de la costa de Gaza, en aguas internacionales.
La Flotilla de la Libertad aseguró que el Ejército israelí apagó las cámaras que transmitían lo que sucedía a bordo del Handala, lo que les hizo perder la comunicación con la embarcación. Denunciaron que esta acción supone «una violación de la ley marítima internacional».
Ante esta grave crisis humanitaria, los esfuerzos de Israel por facilitar el ingreso de ayuda a la Franja de Gaza, a pesar de las tensiones, podrían marcar un importante precedente en la búsqueda de soluciones para aliviar el sufrimiento de la población.
