Tras un amplio operativo policial en la Fundación Arturo López Pérez (FALP), el ministro de Seguridad, Luis Cordero, ha explicado que la visita del condenado Mauricio Hernández Norambuena, conocido como el ‘Comandante Ramiro’, se trató de una visita programada para la realización de un examen médico.
Según Cordero, el exfrentista «se encontraba en el Hospital Penitenciario» y fue trasladado a la fundación porque el examen que se le requería «solo se podía desarrollar fuera del establecimiento del Hospital Penitenciario». El ministro aseguró que Hernández «ha cumplido con todos los protocolos de seguridad» y que en «pocos minutos más debiera ya estar volviendo al Hospital Penitenciario».
Deterioro de Salud Previo
Cabe recordar que Mauricio Hernández Norambuena, condenado por el crimen de Jaime Guzmán en 1991, ya había presentado señales de un deteriorado estado de salud en el pasado. El 25 de junio, fue trasladado desde el Complejo Penitenciario de Rancagua a Santiago debido a que había bajado bruscamente 4 kilos, lo que generó gestiones desde el Ministerio de Salud por la gravedad de su condición.
Protocolos de Seguridad
El ministro Cordero enfatizó que en esta ocasión se han cumplido todos los protocolos de seguridad para la realización del examen médico fuera del Hospital Penitenciario. Esto sugiere que se han tomado medidas exhaustivas para garantizar la seguridad tanto del reo como del personal y las instalaciones de la FALP durante la visita programada.
La situación del ‘Comandante Ramiro’ ha sido objeto de seguimiento y preocupación por parte de las autoridades, dada su delicada condición de salud y su historial criminal. Este nuevo traslado y examen médico parecen formar parte de los esfuerzos por brindarle la atención necesaria mientras se mantienen los protocolos de seguridad pertinentes.