En un nuevo giro en la creciente tensión entre Israel e Irán, el Ejército israelí ha emitido una alerta de evacuación urgente para los residentes de una zona industrial en el norte de Irán, cerca de la costa del mar Caspio. Este aviso llega horas antes de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) lleven a cabo un ataque contra la infraestructura militar del régimen iraní en la región.
El portavoz de las FDI para los medios árabes, Avichay Adraee, publicó el mensaje a las 21:20 horas GMT del jueves, instando a los residentes de la zona industrial de Sefidrud, a unos 300 kilómetros al noroeste de Teherán, a evacuar de inmediato «en preparación para los ataques de las FDI en el área». Horas después, la agencia iraní Fars y la televisión catarí Al Jazeera informaron que las defensas antiaéreas iraníes se activaron en la cercana ciudad de Rasht y que se escucharon explosiones en la zona.
Este no es el primer aviso de evacuación emitido por Israel en las últimas semanas. De hecho, se trata de una estrategia que se ha repetido en múltiples puntos de Irán desde que Israel lanzara su ofensiva contra el país hace una semana, alegando que el programa nuclear de Teherán supone una «amenaza existencial» para el Estado judío.
Una Escalada Militar Sin Precedentes
Desde el inicio de la ofensiva israelí, ambos países han cruzado varias oleadas diarias de misiles, dejando un saldo de 224 muertos del lado iraní, según cifras oficiales, y 24 víctimas mortales del lado israelí. Sin embargo, algunas voces civiles aseguran que el número de bajas en Irán podría ser aún mayor.
La situación ha llevado a un llamado del Gobierno de Chile al «cese inmediato de los bombardeos y toda acción militar» por parte de Israel e Irán, en un intento por frenar la espiral de violencia que amenaza con desestabilizar aún más la región.
Implicaciones para los Residentes
Para los residentes de la zona industrial de Sefidrud, la evacuación ordenada por Israel supone una situación de gran incertidumbre y riesgo. Deben abandonar sus hogares y negocios con poca antelación, dejando atrás sus medios de subsistencia y enfrentándose a la posibilidad de un ataque inminente.
Desde una perspectiva económica, esta situación podría tener graves consecuencias para la actividad industrial y comercial de la región, afectando a trabajadores, empresas y la economía local. Además, la tensión y el miedo entre la población civil se intensifican, generando una sensación de inseguridad y vulnerabilidad.
¿Qué Sigue?
A medida que la crisis entre Israel e Irán se profundiza, es crucial que ambos países y la comunidad internacional trabajen para encontrar una solución diplomática que ponga fin a los ataques y proteja a la población civil. De lo contrario, la escalada militar podría tener consecuencias devastadoras para la región y más allá.
