Miguelo, el talentoso músico chileno, ha recorrido un camino lleno de altibajos y profundo dolor tras la trágica pérdida de su hijo Sebastián, quien falleció a los 32 años. Desde los 3 años, Sebastián vivía con parálisis cerebral, una condición que lo mantuvo en un estado de fragilidad constante. Ahora, Miguelo comparte su conmovedor relato, revelando cómo enfrentó este desafío con una mezcla de fe, amor incondicional y una determinación inquebrantable.
El Momento Más Devastador
Miguelo recuerda vívidamente el día en que recibió la noticia de la muerte de su hijo. Estaba en un aeropuerto en Estados Unidos, cuando su esposa Andrea Yarur lo llamó con la trágica información. «No sabía cómo decirme», recordó Miguelo, quien ya se encontraba «preparado espiritualmente» ante la posibilidad de perder a Sebastián en cualquier momento, dada su delicada condición de salud.
Una Lucha Constante
Durante los años que cuidó de Sebastián, Miguelo vivió en un «bordeline» (límite), consciente de que su hijo podía fallecer en cualquier momento. «Sebastián no podía moverse, entonces cualquier día se podía haber ahogado con darse vuelta durmiendo o no sé, era muy frágil», explicó el artista. Finalmente, Sebastián sucumbió a una enfermedad de la sangre, la leucemia, que Miguelo intuía sería la última vez.
El Amor Incondicional de un Padre
Miguelo reveló que en múltiples ocasiones le «ofreció su vida al de arriba» a cambio de que Sebastián mejorara, demostrando el profundo amor que sentía por su hijo. «Yo creo que voy a estar de luto toda mi vida», admitió, reflejando la magnitud de su dolor y la huella indeleble que dejó la pérdida de Sebastián.
Encontrando Fortaleza en la Fe
A pesar del sufrimiento, Miguelo encontró consuelo en su fe, recurriendo a ella como un ancla en medio de la tormenta. Su creencia inquebrantable en un poder superior le brindó la fuerza necesaria para afrontar este desafío y honrar la memoria de su hijo con una actitud resiliente.
La historia de Miguelo es un testimonio conmovedor de la capacidad humana para superar el dolor y encontrar significado en medio de la adversidad. Su amor incondicional y su fe inquebrantable lo han guiado a través de este camino difícil, y su legado servirá como inspiración para aquellos que enfrentan desafíos similares.
