Desde el Partido Republicano han solicitado protección para el fiscal de Coquimbo, Patricio Cooper, en medio de la polémica por el caso ProCultura, una investigación que lidera el persecutor y que involucra escuchas telefónicas al presidente Gabriel Boric.
El líder del Partido Republicano, Arturo Squella, condenó «la actitud que han tenido los partidos del oficialismo, poniendo el foco en el cambio, solicitando un cambio de fiscal». Squella afirmó que «el Ministerio Público está haciendo un buen trabajo» y que «remover a un fiscal que está haciendo el trabajo, lo único que haría es esconder los datos que se van revelando».
En ese sentido, Squella exhortó al Gobierno a disponer medidas para darle protección al fiscal, señalando que «es natural y razonable que desde el Ministerio del Interior, el Ministerio de Seguridad se disponga toda la seguridad para que el fiscal tenga las garantías de su seguridad y sus cercanos para que pueda seguir sustanciando esta investigación, de la manera que lo ha hecho hasta el momento».
Por su parte, el diputado Cristián Araya afirmó que «es claro que aquí hay una verdadera red de corrupción, los alcances aún no logramos dimensionarlos». Araya recalcó que «al menos que lo tengan claro en el FA, es que no nos va a temblar la mano, como no nos ha temblado nunca, en llegar hasta las últimas consecuencias para que tengan que responder ante la justicia, en sede penal, administrativa y política, todos los que tengan que responder».
El parlamentario señaló además que «el FA ha demostrado funcionar verdaderamente como un cartel, un cartel que hace un defensa corporativa, donde hay una verdadera red que ellos mismos han señalado, el mismo Alberto Larraín ha señalado que está ‘construyendo un reino'».
