Francisca Lavandero, la Miss Mundo Chile 2025, ya se encuentra en Telangana, India, lista para representar a su país en el certamen mundial. Esta piloto comercial, originaria de Los Ángeles, región del Biobío, ha compartido emocionantes postales en sus redes sociales, dando a conocer los primeros pasos de su viaje hacia la competencia.
Pese a que la competencia oficial comienza el jueves 8 de mayo, Lavandero ya ha estado participando en las primeras instancias del certamen, donde ha tenido la oportunidad de conocer a las demás concursantes. En sus historias de Instagram, la joven ha mostrado su habitación de hotel y algunos de los atuendos que utilizará durante la competencia, así como su video de presentación.
Del Sueño de Volar al Miss Mundo
Desde que era niña, Francisca Lavandero soñaba con volar. Cuenta que ni siquiera sabía que las mujeres podían ser pilotos, hasta que un día vio un comercial en la televisión con una capitana chilena animando a más mujeres a alcanzar el cielo. Ese momento fue un punto de inflexión en su vida.
«Ese momento lo cambió todo. Me di cuenta de que nada era imposible»
Inspirada por esa imagen, Lavandero se propuso convertirse en piloto comercial, logrando así cumplir su sueño de infancia. Ahora, con esta oportunidad en el Miss Mundo 2025, la joven tiene la chance de representar no solo a su país, sino también a todas las mujeres que, como ella, se atreven a perseguir sus sueños más allá de los límites establecidos.
Representando a la Mujer Chilena
Para Francisca Lavandero, esta competencia no se trata solo de ganar el título de Miss Mundo. Ella quiere aprovechar esta plataforma para dar voz a la mujer chilena, a esa mujer fuerte, valiente y trabajadora que, con orgullo, construye su país.
«Lo más hermoso de esta oportunidad no es solo representar a Chile, es representar a su gente: a la mujer chilena fuerte, valiente y trabajadora, a los hombres luchadores y a cada persona que con orgullo construye este país»
Con su determinación y su compromiso de empoderar a las mujeres, Francisca Lavandero se ha convertido en un símbolo de inspiración para las niñas y jóvenes de Chile, demostrando que el cielo no es el límite cuando se tiene la valentía de perseguir los sueños.