Gemma Underwood, una karateca escocesa, vivió una experiencia aterradora después de un entrenamiento particularmente intenso. Su orina se volvió negra como la Coca-Cola y sus músculos se inflamaron, lo que la llevó de urgencia al hospital. Allí le diagnosticaron rhabdomyolisis, una grave enfermedad causada por la descomposición del tejido muscular.
Según Gemma, los médicos le explicaron que la deshidratación durante el entrenamiento fue la principal causa de su condición. «Los médicos dijeron que no me hidraté lo suficiente durante un entrenamiento intenso. Debería haber tomado más agua antes»
, comentó la karateca.
Los Peligros de la Rhabdomyolisis
La rhabdomyolisis ocurre cuando las fibras musculares se descomponen, liberando sustancias dañinas para los riñones. Esto puede suceder por lesiones, enfermedades o, como en el caso de Gemma, por un esfuerzo físico excesivo sin la debida hidratación.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los síntomas incluyen dolor muscular, debilidad y orina oscura. Si no se trata a tiempo, puede causar daño renal e incluso la muerte.
Un Tratamiento Largo y Complicado
Gemma estuvo hospitalizada durante cinco días recibiendo los cuidados necesarios. Sin embargo, su recuperación completa podría tardar semanas o incluso meses, dependiendo de las complicaciones.
«Estoy muy agotada… el tratamiento puede durar algunas semanas o incluso meses, dependiendo de las complicaciones»
, reveló Gemma.
Prevención: La Clave para Evitar Tragedia
La experiencia de Gemma sirve como una importante lección sobre la importancia de la hidratación adecuada durante los entrenamientos intensos. Ella advierte:
«Tuve mucho miedo al saber que pude haber muerto. Asegúrense de estar bien hidratados antes de cualquier entrenamiento, no importa qué tan intenso sea. Es algo que le puede pasar a cualquiera»
.
Además de mantenerse bien hidratado, es crucial estar atento a los síntomas de rhabdomyolisis, como dolor muscular, debilidad y orina oscura. Si se presentan, es fundamental buscar atención médica de inmediato para evitar complicaciones graves.
La historia de Gemma es un recordatorio poderoso de que incluso los atletas más dedicados deben priorizar su salud y seguridad. Con la debida precaución y conocimiento, se puede evitar que un entrenamiento intenso se convierta en una pesadilla.