Los apoderados de la Escuela Despertar, un establecimiento de educación diferencial en la región de Aysén, han tomado medidas drásticas al cortar de forma indefinida la ruta que une Puerto Aysén con Chacabuco. Esta acción surge tras no llegar a un acuerdo con el Ministerio de Educación sobre el incumplimiento de compromisos adquiridos previamente.
Según los apoderados, en julio de 2024 las autoridades regionales, encabezadas por el ministro Nicolás Cataldo, se comprometieron a instalar una escuela modular en paralelo a la construcción de un nuevo establecimiento. Sin embargo, a ocho meses de este plazo, la seremi de Educación, Isabel Garrido, les ha informado que el proyecto de la escuela modular «no va» por falta de recursos y recomendaciones técnicas.
Entre las principales exigencias de los padres y tutores se encuentran:
- Concretar el compromiso del ministro Cataldo para instalar la escuela modular en un corto plazo.
- Reintegrar a dos profesoras que, según ellos, fueron desvinculadas injustamente.
- Conocer qué entidad técnica se hará cargo del proyecto de la nueva escuela.
- Implementar una jornada escolar completa para los niveles NT1 y NT2.
- Revisar los casos de cursos juntados este año escolar y verificar la capacidad de tenerlos juntos.
- Que la directora (s), Myriam Márquez, pida disculpas públicas.
- Que los 39 funcionarios en condiciones laborales indignas tengan derecho a 60 minutos de colación.
- Salida de la seremi de Educación, Isabel Garrido, y del director regional del Servicio Local de Educación Pública, Sebastián González.
- Designar un interlocutor empático y respetuoso por parte del Ministerio de Educación.
Según el dirigente de los apoderados, Ramón Díaz, la manifestación surge tras percatarse de que los estudiantes «no tenían una vía de escape inclusivo» después de un amago de incendio en marzo del año pasado. Esto los llevó a poner urgencia al proyecto de la nueva escuela.
Por su parte, el alcalde de Aysén, Luis Martínez, informó que la ruta lleva cerca de 48 horas cortada y que el diálogo lo lleva actualmente el delegado presidencial regional, Jorge Díaz. Martínez explicó que ante la imposibilidad de hacer la escuela modular, el establecimiento se mudaría a un «colegio antiguo» mientras se construye el edificio nuevo, que debería estar listo en 1 o 2 años.
Los apoderados de la Escuela Despertar buscan soluciones integrales que mejoren las condiciones de los estudiantes y exigen el cumplimiento de los compromisos adquiridos por las autoridades. La negociación sigue en curso, con la esperanza de llegar a un acuerdo que satisfaga las demandas de la comunidad escolar.
