Pamela David y Daniel Vila conforman una de las familias ensambladas más sólidas del ambiente del espectáculo. A pesar de que ambos tenían hijos previos a su relación, también tuvieron una hija en común, Lola. En una reciente entrevista, Pamela habló sobre cómo hace para que sus hijos puedan apreciar los objetos materiales que tienen y desarrollar una actitud responsable con el dinero.
Según Pamela, cuando ella comenzó su carrera hace más de 25 años, su hijo Felipe la acompañaba al teatro, aunque era muy pequeño para recordarlo. «Yo a mis hijos les digo que tienen una mamá laburante», comentó la conductora, explicando que les cuenta cómo fue su esfuerzo y dedicación para poder adquirir sus propias pertenencias. «En una época llegué a tener tres trabajos«, recordó, «era vedette de Nito Artaza, hacía un infantil y a la noche iba de panelista a Animales Sueltos. No paraba realmente y así me compré mi casa y mi auto. A ellos les cuento cómo fue mi esfuerzo por el que pude ganarme mis cosas».
Pamela también reveló que le cuesta mucho tomarse días de descanso y es por eso que casi no se toma vacaciones durante el año: «Me gusta trabajar. Tengo compañeros que cubren holgadamente el espacio y no es que se nota la ausencia. Yo extraño trabajar. Cuando me fui a la Copa América me llevé todo el equipo del canal y yo insistía en salir desde allá y no… No siempre se da la oportunidad y al final no lo pude cubrir».
Teniendo en cuenta que tanto ella como su marido no tienen problemas económicos, la conductora resaltó su método para que sus hijos valoren lo que tienen y logren tener una relación responsable con el dinero. «Lo primero es que a Daniel se le ocurrió hace un par de años darles una mesada y con eso ellos tienen que resolver sus gastos. Por supuesto que nosotros nos hacemos cargo de cosas como el uniforme de colegio o el gimnasio porque es por su salud», explicó. «Si hay un gusto que se tienen que dar porque hay unas zapatillas que les encantan, tienen que ahorrar de su plata y comprarla».
De esta manera, Pamela y Daniel buscan inculcar en sus hijos el valor del esfuerzo, el ahorro y la responsabilidad financiera, a pesar de contar con una situación económica estable. Una lección valiosa que les permitirá a los jóvenes desarrollar hábitos saludables con el dinero a lo largo de sus vidas.
