En un movimiento preventivo para salvaguardar la sanidad animal y la seguridad alimentaria, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile ha suspendido la importación de productos lácteos y cárnicos provenientes de Alemania. Esta decisión se produce luego de que se confirmara un brote de fiebre aftosa en búfalos de la región de Brandeburgo, en el país europeo.
Fiebre Aftosa en Alemania: Impacto en el Comercio con Chile
Según la Corporación de la Carne de Chile, el brote de fiebre aftosa en Alemania ha activado de inmediato un plan de restricciones y zonas bajo estricta vigilancia en ese país. Si bien las exportaciones de productos de riesgo hacia Chile fueron autosuspendidas por el Gobierno alemán, el SAG acogió la solicitud de suspender la certificación de productos lácteos y cárnicos procedentes del mercado germano.
Fortaleciendo el Consumo de Productos Nacionales
Ante esta contingencia, el presidente de la Corporación de la Carne, Sergio Willer, afirmó que este escenario propicia robustecer el llamado al consumo de producto nacional. Esto no solo ayudará a proteger la industria ganadera chilena, sino que también avanzará hacia la extinción de otras enfermedades del ganado.
Antecedentes de la Fiebre Aftosa en Chile
Cabe mencionar que Chile se declaró oficialmente libre de fiebre aftosa el 16 de enero de 1981, luego de cumplir con todos los requisitos sanitarios internacionales. A diferencia de otros países del Mercosur, que también ostentan el mismo rótulo, la situación de Chile se debe a la ausencia de la enfermedad, y no al uso de vacunas.
Protegiendo la Industria Ganadera y la Salud Pública
Desde el Servicio Agrícola y Ganadero, su director en la región de Los Lagos, Francisco Briones, confirmó las restricciones impuestas para evitar el ingreso de la fiebre aftosa al país. Esta medida preventiva busca salvaguardar la industria ganadera chilena y la salud pública, ante la detección del brote en Alemania.
En resumen, la suspensión de las importaciones de productos lácteos y cárnicos desde Alemania es una acción estratégica para proteger la sanidad animal y la seguridad alimentaria en Chile. Esta contingencia zoosanitaria también abre oportunidades para fortalecer el consumo de productos nacionales y avanzar hacia la erradicación de otras enfermedades del ganado.
