Según los últimos informes técnicos, el próximo ajuste en las tarifas de la luz programado para enero de 2025 traería consigo una sorpresa positiva para los consumidores residenciales. A diferencia de los aumentos promedio de 20% proyectados anteriormente, los expertos ahora vaticinan un alza significativamente menor, cercana al 9.5% para los clientes de bajo consumo (menos de 350 kWh/mes).
Factores que moderan el ajuste
Varios elementos han confluido para que el impacto del próximo ajuste tarifario sea más contenido de lo esperado. Por un lado, se prevé una reducción de 4.2% en las tarifas para clientes industriales y comerciales, debido a la finalización de algunos contratos de suministro eléctrico a precios elevados. Esto contrasta con el efecto del descongelamiento tarifario, que implicará un cargo adicional de $22 por kWh para los consumidores residenciales.
Según el socio director de la consultora EnergiE, Daniel Salazar, el precio del dólar y la variación de los combustibles han sido factores clave que han moderado el ajuste proyectado para enero de 2025
. Esto se refleja en las nuevas expectativas plasmadas en el Informe Técnico Preliminar de Precios de Nudo Promedio (PNP) del Sistema Eléctrico Nacional.
Impacto Diferenciado en Hogares y Empresas
Si bien el ajuste residencial se mantendría en torno al 9.5%, las empresas verían una reducción de 4.2% en sus tarifas. Esta divergencia se debe a que los clientes industriales y comerciales ya han acumulado alzas significativas, llegando a un 42.8% desde mayo, según datos del Diario Financiero.
En contraste, para los consumidores de bajo consumo, el proceso de sinceramiento tarifario acumulará más de un 50% de aumento total. Esto se explica por el efecto del descongelamiento de las tarifas, que implicará un cargo adicional de $22 por kWh.
Expectativas de Estabilización a Futuro
Pese a este nuevo ajuste, los expertos proyectan que el proceso de sinceramiento tarifario estaría llegando a su fin, lo que augura una mayor estabilidad en los próximos años. Para enero 2025 proyectamos un alza de 9.5 % en clientes regulados de bajo consumo, menos de 350 kWh/mes
, afirmó Salazar.
Esta noticia, si bien no exenta de impacto en los bolsillos de los consumidores residenciales, representa una mejora significativa respecto a las alzas más pronunciadas que se habían anticipado anteriormente. Ahora, tanto hogares como empresas podrán planificar con mayor certeza sus presupuestos energéticos a futuro.