Kamala Harris y Donald Trump: Duelo Económico por la Casa Blanca

Las elecciones presidenciales de Estados Unidos se acercan y los dos principales candidatos, Kamala Harris y Donald Trump, han dejado clara su visión económica para el país. Ambos han presentado planes ambiciosos que buscan convencer a los votantes de que son la mejor opción para gestionar los desafíos económicos que enfrenta la nación.

La Propuesta Económica de Kamala Harris

Kamala Harris, la candidata demócrata, ha centrado gran parte de su campaña en abordar los problemas económicos que preocupan a la clase media estadounidense. Consciente de que los costos de vida continúan en aumento y que la propiedad de una vivienda se ha vuelto un sueño inalcanzable para muchos, Harris ha presentado un plan ambicioso para aumentar la construcción de viviendas asequibles.

Su iniciativa incluye incentivos fiscales destinados a estimular nuevas construcciones y reducir los costos para inquilinos y compradores de viviendas. Harris ha hecho de la vivienda uno de los pilares de su campaña, presentándola como una solución integral a un problema que afecta tanto a las áreas urbanas como rurales de Estados Unidos.

Además, la vicepresidenta ha prometido nuevas exenciones fiscales para las pequeñas empresas, elevando de 5.000 a 50.000 dólares las deducciones a las que se pueden acoger quienes empiezan un emprendimiento. Según Harris, estos pequeños negocios están construyendo un futuro mejor para sus empleados y para sus comunidades, y, por ende, están erigiendo una clase media más fuerte y un Estados Unidos más fuerte para todos.

La Propuesta Económica de Donald Trump

Por su parte, el candidato republicano Donald Trump ha hecho de la economía el centro de su campaña, confiando en su historial como expresidente para convencer a los votantes de que él es la mejor opción para gestionar los desafíos económicos del país.

Trump ha prometido reducir la tasa impositiva corporativa del 21% al 15%, pero solo para las empresas que fabrican sus productos en Estados Unidos. Además, ha anunciado que ampliará los aranceles a los productos importados del extranjero, asegurando que si (una empresa) subcontrata o reemplaza a trabajadores estadounidenses, no tiene derecho a ninguno de estos beneficios. De hecho, pagará un arancel muy alto.

El exmandatario también ha presentado un plan para eliminar los impuestos a las propinas, una medida que busca ganarse el apoyo de los trabajadores del sector de servicios.

Conclusión

Tanto Kamala Harris como Donald Trump han dejado clara su visión económica para Estados Unidos, ofreciendo propuestas que buscan convencer a los votantes de que son la mejor opción para gestionar los desafíos económicos que enfrenta el país. Mientras Harris se enfoca en la construcción de viviendas asequibles y el apoyo a las pequeñas empresas, Trump se centra en la reducción de impuestos y el aumento de aranceles a las importaciones.

Con el primer debate presidencial a la vuelta de la esquina, los electores tendrán la oportunidad de evaluar de cerca las propuestas de ambos candidatos y tomar una decisión informada sobre quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca.