Un escándalo ha sacudido al equipo de fútbol San Luis de Quillota, de la Primera B chilena, después de que la influencer trans Alison Vargas, conocida como Alison Baruchh, denunciara ataques transfóbicos por parte de tres de sus jugadores.
Según el relato de Alison, los hechos ocurrieron el 2 de noviembre, el mismo día en que San Luis fue goleado 3-0 por Santiago Morning. Ella cuenta que conoció a los jugadores ‘canarios’ en la discoteca «Woo» de Valparaíso, pero la discriminación vino después, a través de las redes sociales.
\»En la disco no pasó nada. La discriminación fue después, por redes. Me conocían y se les dio la gana humillarme\», explicó Alison al Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), que ha respaldado a la víctima.
Según la denunciante, los futbolistas subieron historias llamándola «travesti culiao» y riéndose de ella. \»No quiero que esto le pase a ninguna niña trans más. Todos merecemos respeto\», recalcó Alison.
Exigencia de Disculpas y Sanciones
Desde el Movilh lamentaron que «estas agresiones son intolerables. Reflejan el desprecio que vivimos las personas trans a diario. Exigimos disculpas públicas de los agresores y sanciones inmediatas del club. Todo silencio o inacción los hace cómplices».
Por su parte, San Luis recibió los antecedentes y se comprometió a iniciar una investigación interna, pero hasta el momento no se han pronunciado al respecto.
Impacto en la Comunidad Trans
Este incidente pone de manifiesto los desafíos que enfrentan las personas trans en la sociedad, incluso en espacios que deberían ser de inclusión y respeto. La denuncia de Alison Vargas es un llamado a erradicar la transfobia y a garantizar la dignidad y los derechos de la comunidad LGBTIQ+.
Es crucial que el club San Luis actúe con celeridad y transparencia, sancionando a los jugadores involucrados y enviando un mensaje claro de que no tolerarán este tipo de conductas. Solo así podrán contribuir a crear un entorno más seguro y equitativo para todos los miembros de la comunidad futbolística.