La conurbación de cuatro municipios del litoral central de Chile (Santo Domingo, San Antonio, Cartagena y Las Cruces-El Tabo) conforma una ciudad de unos 150 mil habitantes que aquí denominamos Cartagena-San Antonio. Lamentablemente, es un espacio de «no habitar» donde se acumulan problemas de toda índole desde hace decenios.
Antaño, Cartagena era el balneario de Santiago, con paseo costero, barrios de veraneo, tren de pasajeros y playas populares. Sin embargo, los desarrollos turísticos un poco más al norte dejaron a Cartagena en el olvido y en un estado de precarización progresiva. Por su parte, San Antonio se ha convertido poco a poco en el puerto de mayor tonelaje del país, con buena conectividad con Santiago, pero dependiente de la lejana Valparaíso. La política de infraestructura del país planificó una extensión del puerto para convertirlo en el más grande de la costa pacífica de América Latina, lo que conlleva impactos ambientales que harán insostenibles los ecosistemas de este borde costero.
Propuestas Ciudadanas para (Re)Generar la Ciudad
Conscientes de tanta adversidad y en el espíritu de la lenta construcción del derecho a la ciudad, un grupo de profesionales del Comité Hábitat y Vivienda del Colegio de Arquitectos decidieron acompañar un proceso de encuentro entre organizaciones ambientales, culturales y patrimoniales de Cartagena y San Antonio para que estas pudieran expresarse con gráficas y voz en la Bienal de Arquitectura 2025.
El proceso de los encuentros ciudadanos locales resultó complejo y desafiante, pero finalmente se logró lo comprometido: según la tradición de Altazor, del poeta Huidobro, fueron siete láminas de gran formato y creatividad gráfica en las que se expresan «el no habitar, como una herida socio territorial, deviene resistencia, el arte y la fuerza colectiva unirán nuestros fragmentos para crear ciudad», con denuncias y setenta y siete propuestas.
Organizaciones Participantes
Las palabras, ideas y propuestas vienen de varias organizaciones locales, entre las cuales se encuentran: Cartagena Rural, Cartografía Mágica, Casa Ortiga, Colectivo de Historiadores, Comité Ambiental Comunal, Fundación por la Memoria, La Ciudadana de a pie, Ojos de Mar, Patio Ferreiro, Utopía Lab y Vivero Litoral Nativo.
Arpillera Colectiva: Solidaridad, Denuncia y Sanación
Como broche de oro a esta experiencia, se produjo una gran arpillera, en el rescate de una expresión artística tradicional para una creación colectiva de mujeres, combinando solidaridad, denuncia, memoria y sanación grupal para proponer otra forma de ciudad para todas y todos.
La pregunta que ronda e ilumina la presencia de los habitantes de Cartagena y San Antonio con su propuesta en la XXIII Bienal de Arquitectura y Urbanismo de Chile es precisamente por la ciudad y su puerto. Mientras existe una política portuaria que define horizontes de desarrollo, la ciudad carece de herramientas y perspectivas para definir su futuro, quedando a merced de decisiones poco relacionadas con la ciudadanía local.
Todo queda por hacer para abrir espacios de diálogo y negociación entre estas organizaciones ciudadanas, el Estado, la empresa portuaria, la institucionalidad urbana y el rechazo a la violencia del desalojo. La creatividad y la fuerza colectiva de los habitantes de Cartagena-San Antonio pueden ser la clave para (re)generar esta ciudad.