La industria cárnica de Chile se enfrenta a una crisis sin precedentes, con plantas faenadoras de las regiones de Los Ríos y Los Lagos acusando pérdidas diarias de 500 mil dólares debido al paro de un sector de los trabajadores del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
Según Rafael Lecaros, gerente general de la Asociación Gremial de Plantas Faenadoras Frigoríficas de Carnes de Chile, estas tres plantas son responsables del 50% de la producción de carne en el país. Por lo tanto, el impacto de este conflicto laboral es devastador para la industria y la economía nacional.
Demandas Insatisfechas y Reemplazos Cuestionables
Los trabajadores del SAG justifican su movilización con una serie de demandas, incluyendo aumentos de grado, ascensos a contrata, asignaciones de alimentación y locomoción, y la eliminación de circulares internas. Además, acusan la sustitución de inspectores experimentados por personal sin la debida capacitación, lo que compromete la trazabilidad y la inocuidad del proceso de faenado.
Impacto en la Imagen País
Más allá de las gestiones gremiales, el representante del sector de plantas faenadoras, Rafael Lecaros, señala que se requiere una respuesta concreta del SAG ante los desafíos que enfrenta la industria, que se encuentra en proceso de inserción en nuevos mercados internacionales. La falta de reacción institucional podría incumplir acuerdos comerciales y afectar seriamente la imagen de Chile en el ámbito global.
Llamado a la Resolución del Conflicto
Hasta el momento, el SAG no ha emitido un pronunciamiento claro sobre la situación actual, limitándose a responder desde el nivel central y comprometiendo evaluar el conflicto y sus efectos. Sin embargo, la industria cárnica urge por una solución que permita revertir las millonarias pérdidas y preservar la reputación internacional de Chile.
