De la casa de ‘Gran Hermano’ a las pantallas de televisión, Lucas Crespo está dando un giro inesperado a su carrera. El joven de 26 años, conocido hasta ahora como influencer y profesor de Jiu Jitsu, acaba de debutar como actor en la nueva teleserie de Canal 13, «El obrero que me enamoró«.
Crespo interpretará a Ángel Manríquez, un apasionado obrero de la construcción que logra conquistar a la protagonista, Amanda (interpretada por Carola Varleta). Según la descripción del canal, Ángel «parece salido de sus propios libros: fuerte, rudo, apasionado, el tipo de hombre que despierta su deseo más prohibido».
Para el ex participante de ‘Gran Hermano’, esta no es una oportunidad cualquiera. Desde niño, Crespo ha estado inmerso en el mundo del cine y el teatro, gracias a los deseos de su madre de ser actriz. «Mi mamá siempre ha querido ser actriz y por eso desde niño me metió en el mundo del cine y el teatro, me lo inculcó desde muy chico», comenta el joven.
Aunque esta es su primera incursión formal como actor, Crespo se muestra entusiasmado y humilde ante el reto. «Es una oportunidad muy grande que se me presentó, y vengo muy desde la humildad, del aprendizaje, con boca cerrada y oídos muy abiertos, y dispuesto a empaparme del conocimiento de mis colegas», afirma.
Más allá de los desafíos, Crespo reconoce que interpretar este papel de galán le ha subido la autoestima. «Si bien es un desafío hacerse el ‘mino’, es entretenido y es un paso más para poder amarse más a uno mismo. Te sube el autoestima que te pongan en el rol de ‘tienes que ser la fantasía de quien vea esto'», confiesa.
Con esta nueva faceta, Lucas Crespo demuestra que su talento y versatilidad van más allá de las redes sociales y las artes marciales. Ahora, se abre paso como actor en una de las producciones más esperadas de Canal 13, dejando atrás su imagen de participante de ‘Gran Hermano’ para convertirse en el nuevo galán de la televisión.
