La surfista australiana Ellie-Jean Coffey se ha visto envuelta en una controversia inesperada después de compartir un video en Instagram donde se le ve orinando en un lago de Australia. Lejos de ser un acto inapropiado, la joven de 30 años simplemente estaba atendiendo una necesidad fisiológica mientras disfrutaba de un paseo en bote, con un cocodrilo a solo unos metros de distancia.
Sin embargo, el video se volvió viral en las redes sociales de la India, donde fue tergiversado y acusado de que Coffey había defecado en un lago cerca de Udaipur, un sitio sagrado y pintoresco. Esto desató una ola de indignación y amenazas de deportación contra la surfista, a pesar de que ella nunca ha estado en la India.
Según Coffey, el video solo la muestra orinando, y fue grabado por un amigo que pensó que sería «un poco de diversión». La surfista explicó que ella y otros pasajeros del bote suelen hacer sus necesidades cuando están en el puerto o, en su defecto, utilizando un cubo. «Había un cocodrilo de 1,52 metros cerca, así que me arriesgué y fui sin perderlo de vista», detalló.
Una Tormenta de Desinformación
Tras la tergiversación del video, Coffey comenzó a recibir comentarios de personas que le preguntaban si estaba en la India, a pesar de que ella nunca ha estado allí. «Hubo gente que me dijo que debería ser deportado de la India, y nunca he estado allí», aseguró la deportista.
Ante la controversia, Coffey subtituló el clip aclarando: «Voy a dejar las cosas claras: soy australiano: este es el interior de Australia: NO FUE EN LA INDIA». Insistió que «nunca haría eso» y que es «increíble lo rápido que una mentira puede propagarse en Internet».
Más Allá de la Desinformación
Más allá de la tormenta de desinformación, la historia de Ellie-Jean Coffey revela una realidad más profunda. En 2020, la surfista reveló que sus sueños de llegar a la cima del surf se vieron aplastados al ser abusada «mental y físicamente» por figuras poderosas dentro de la disciplina.
Este incidente es un recordatorio de la importancia de verificar los hechos y evitar la propagación de rumores y acusaciones infundadas. La reputación y el bienestar de las personas pueden verse gravemente afectados por la desinformación, incluso cuando se trata de algo tan simple como una escena de una persona atendiendo una necesidad fisiológica.
