La desaparición de Julia Chuñil hace casi un año ha generado una intensa controversia, con la fiscal de Los Ríos, Tatiana Esquivel, cuestionando si la mujer era realmente una activista. Sin embargo, la abogada de la familia de Julia, Karina Riquelme, ha salido en su defensa, acusando a la fiscal de demostrar «ignorancia respecto a los pueblos originarios y su relación con la tierra».
Según Riquelme, Julia Chuñil era reconocida como una defensora ambiental, vinculada a la protección de territorios ancestrales y sitios de significación cultural. Esto contradice las declaraciones de la fiscal, quien afirmó que no existen antecedentes que permitan afirmar que Chuñil ejercía una labor política o de activista organizada.
Cuestionando la Falta de Atención a las Víctimas
Además de cuestionar las declaraciones de la fiscal, la abogada Riquelme también criticó que la Fiscalía «tenga tiempo para dar entrevistas y opinar generalidades, pero no para recibir a las víctimas». Esta falta de atención a la familia de Julia Chuñil, la principal víctima del caso, ha sido ampliamente cuestionada.
El Legado de Julia Chuñil como Defensora Ambiental
Sebastián Benfeld, representante de Escazú Ahora, también salió en defensa de Julia Chuñil, calificando como «impresentable» que la fiscal «tenga tiempo para estar dando entrevistas, pero no para reunirse con la familia que es la principal víctima de todo este caso». Benfeld enfatizó que Chuñil no solo defendía 900 hectáreas de bosque nativo, sino que también reivindicaba de manera activa el trabajo de la comunidad de Putreguel y el rol de las comunidades mapuches en la preservación y conservación del medio ambiente.
Queda claro que, para la familia y allegados de Julia Chuñil, su legado como defensora ambiental es innegable. La fiscal Esquivel deberá reconsiderar su posición y profundizar en la investigación para comprender plenamente la importancia del trabajo de Chuñil en la protección de los territorios ancestrales de su comunidad.