En una contundente muestra de rechazo a los intentos de socavar la democracia, miles de brasileños se manifestaron este domingo en diversas ciudades del país contra un proyecto de amnistía que podría beneficiar al expresidente Jair Bolsonaro, condenado a 27 años de prisión.
Las protestas, convocadas bajo el lema «Congreso enemigo del pueblo», tuvieron lugar en Río de Janeiro, São Paulo, Salvador y otras capitales, lideradas por importantes figuras de la música y la cultura brasileña. Los manifestantes exigieron que no haya amnistía y que se preserve la democracia.
Artistas y Activistas se Unen Contra la Amnistía
En Río de Janeiro, la manifestación fue encabezada por íconos de la música como Caetano Veloso, Chico Buarque, Gilberto Gil y Djavan, quienes deleitaron a la multitud con más de dos horas de espectáculo.
«Sin amnistía y con democracia: ese es un Brasil bonito», expresó Caetano Veloso desde un trío eléctrico, en referencia a la ocupación de Copacabana por bolsonaristas que exigían una amnistía.
Protestas en Todo el País y en el Exterior
En São Paulo, los manifestantes desplegaron una gigantesca bandera de Brasil en la fachada del Museo de Arte, en respuesta a la bandera estadounidense que se exhibió durante un acto de apoyo a Bolsonaro.
En Salvador, la artista Daniela Mercury sorprendió al aparecer acompañada del actor Wagner Moura, quien celebró el «momento extraordinario que atraviesa la democracia brasileña».
Las protestas se extendieron a otras ciudades como Recife, Brasilia y Belo Horizonte, e incluso a brasileños residentes en el exterior, que se manifestaron en Lisboa, Londres y Berlín.
Proyecto de Amnistía en Proceso de Negociación
El proyecto de amnistía, cuyo texto aún se encuentra en proceso de negociación, deberá recibir el respaldo de la mayoría de los diputados brasileños para luego ser sometido al escrutinio del Senado. Sin embargo, la movilización ciudadana ha dejado claro que una gran parte de la sociedad brasileña no está dispuesta a aceptar una amnistía que pueda beneficiar a Bolsonaro y a otros condenados por actos golpistas.
La defensa de la democracia y el rechazo a cualquier intento de socavarla han sido el eje central de estas multitudinarias protestas, que reflejan el compromiso de los brasileños con los principios fundamentales de su sistema político.
