En una noche de pesadilla para los viajeros, los aeropuertos de Europa se han visto paralizados por un ciberataque a gran escala. La compañía Collins Aerospace, que presta servicios de facturación y embarque en la mayoría de los aeródromos del continente, sufrió un ataque informático de origen desconocido el pasado viernes 19 de septiembre.
El impacto ha sido devastador, con vuelos cancelados y retrasos masivos que han afectado a miles de pasajeros. En el aeropuerto de Bruselas, por ejemplo, se cancelaron nueve vuelos y otros quince sufrieron retrasos de una hora o más. La situación fue similar en otros importantes hubs como Heathrow, en Londres, y Berlín-Brandeburgo, en Alemania.
Caos en los aeropuertos
Debido a la incidencia, las operaciones de facturación y embarque tuvieron que realizarse manualmente en los aeropuertos afectados, lo que generó largas colas y tiempos de espera insostenibles para los pasajeros.
Desde los aeródromos se hizo un llamamiento a los viajeros para que verificaran el estado de sus vuelos antes de desplazarse a las terminales, y solo acudieran si su operación estaba confirmada. En el caso de Heathrow, incluso se pidió a los pasajeros de vuelos de larga distancia que se presentaran con hasta tres horas de antelación, y a los de vuelos nacionales, con dos horas.
Origen desconocido
Según la información disponible, el ciberataque no ha sido reivindicado por ningún grupo o individuo. Las autoridades aeroportuarias y la propia Collins Aerospace se encuentran trabajando para resolver el problema y restablecer la normalidad en el menor tiempo posible.
Este incidente pone de manifiesto la vulnerabilidad de la infraestructura aeroportuaria ante las amenazas cibernéticas y la necesidad urgente de reforzar la seguridad de los sistemas informáticos que sustentan operaciones críticas como la facturación y el embarque de pasajeros.
A medida que se conozcan más detalles sobre el origen y el alcance de este ciberataque, será crucial que las autoridades competentes investiguen a fondo los hechos y tomen las medidas necesarias para evitar que se repitan situaciones similares en el futuro.