La cadena de restaurantes estadounidense Cracker Barrel, conocida por su distintiva estética sureña y tradicional, se vio envuelta en una controversia esta semana cuando presentó una versión renovada de su clásico logo. La reacción no se hizo esperar, con el expresidente Donald Trump y algunos clientes criticando el cambio y calificándolo de «woke».
El nuevo diseño, que eliminaba el icónico barril que da nombre a la cadena, así como la figura del hombre apoyado en él y las palabras «Old Country Store», buscaba acercarse más a la idea del barril, según la empresa. Sin embargo, esta explicación no convenció a todos, y las acciones de Cracker Barrel llegaron a caer un 7% al cierre de los mercados.
La Respuesta de Trump y la Marcha Atrás de Cracker Barrel
Trump, conocido por sus críticas al «progresismo», no tardó en expresar su molestia en su red Truth Social. «Cracker Barrel debería volver al antiguo logo, admitir que fue un error basándose en la respuesta de los clientes (la encuesta definitiva) y gestionar la empresa mejor que nunca», escribió el expresidente.
Unas horas después, la empresa anunció que recuperaría su logo tradicional. «Agradecemos a nuestros invitados por compartir sus voces y amor por Cracker Barrel. Dijimos que escucharíamos y lo hemos hecho. Nuestro nuevo logo desaparecerá y nuestro ‘Old Timer’ permanecerá», compartieron desde el perfil oficial de la cadena en redes.
La Identidad de Cracker Barrel y la Controversia «Woke»
Cracker Barrel es una de las cadenas de restaurantes más emblemáticas de Estados Unidos, conocida por su temática sureña y tradicional que evoca a una tienda «country». Su estética rústica y elementos vintage han atraído a aquellos que defienden valores más conservadores y buscan evocar tiempos pasados.
Algunos críticos acusaron a la compañía de estar llevando a cabo un movimiento «woke» con el cambio de logo, término que Trump utiliza para referirse al progresismo. Sin embargo, la empresa se apresuró a aclarar que su misión sigue siendo «servir comida deliciosa, cálidas bienvenidas y el tipo de hospitalidad campestre que se siente como familia».
Lecciones Aprendidas: Cuando el Cambio Genera Controversia
Este episodio demuestra cómo incluso los cambios más aparentemente sencillos, como una actualización de logo, pueden generar reacciones inesperadas y dividir a la opinión pública. Para Cracker Barrel, la lección fue clara: escuchar atentamente a sus clientes y ser sensible a su identidad y valores tradicionales. La empresa supo responder rápidamente, recuperando su logo clásico y reafirmando su compromiso con la hospitalidad y la esencia sureña que la ha caracterizado durante décadas.
En un entorno cada vez más polarizado, las marcas deben navegar con cautela al introducir cambios, asegurándose de mantener una conexión auténtica con su público y evitar ser percibidas como «woke» o alejadas de sus raíces. La clave está en equilibrar la innovación con la preservación de la identidad y los valores que han hecho grande a la empresa.
