Una escena de terror se vivió en el Fundo Los Prados, en Victoria, región de La Araucanía, cuando un grupo armado atacó a sangre fría a dos patrulleros forestales. El saldo: un trabajador muerto y otro gravemente herido.
Según los primeros informes, al menos cuatro sujetos con armas largas se acercaron por la parte trasera de la camioneta donde se desplazaban los vigías Manuel León Urra y César Osorio. Sin mediar palabra, abrieron fuego a quemarropa, disparando a matar y por la espalda a los trabajadores.
Un Ataque Premeditado y Brutal
Desesperadamente, César Osorio intentó refugiarse en la camioneta, pero los disparos no cesaron. Recibió al menos tres impactos balísticos por la espalda y cayó del vehículo. Mientras tanto, el conductor Manuel León Urra fue alcanzado en la cabeza.
Según las autoridades, existen dos hipótesis sobre la motivación de este crimen: un intento de robo de la camioneta o un ataque planificado y organizado como «demostración de fuerza». Sin embargo, la primera opción pierde fuerza, ya que los atacantes no se llevaron el vehículo ni nada de su interior, y tampoco verificaron si había sobrevivientes.
Reacción del Gobierno y Llamado a la Unidad
Tras este nuevo hecho de violencia que remece a La Araucanía, el ministro de Seguridad, Luis Cordero, se reunió con la Fiscalía, las policías, el Ejército y Gendarmería para fortalecer la investigación y dar con los responsables. También visitó al trabajador sobreviviente en la clínica y se reunió con los hijos de Manuel León Urra.
Este ataque a sangre fría contra trabajadores forestales es un duro golpe que exige una respuesta contundente y unificada de las autoridades. La paz y seguridad en la región deben ser una prioridad urgente.
