El Club Atlético Independiente emitió este lunes un comunicado oficial en el que reconoció que más de 90 socios y socias fueron agredidos por la hinchada de La U durante los violentos incidentes ocurridos el pasado miércoles 20 de agosto, en el estadio Libertadores de América, en el partido por Copa Sudamericana.
En un esfuerzo por recopilar pruebas, el club argentino lanzó una campaña en sus redes sociales para que los hinchas y socios que pudieran haber sufrido agresiones por parte de los simpatizantes azules reportaran sus testimonios. «De las casi 400 respuestas que recibimos hasta el momento, más de 90 socios y socias nos reportaron haber sido agredidos por los diversos proyectiles que fueron lanzados desde la tribuna visitante», detalló la institución.
Buscando Defenderse ante Conmebol
De esta manera, el ‘Rojo’ continúa responsabilizando a la fanaticada chilena de la barbarie ocurrida en el recinto de Avellaneda, que terminó con la cancelación del encuentro internacional. Esto pese a las últimas declaraciones del presidente de Independiente, Néstor Grindetti, quien también cargó contra su propia hinchada.
Desde el ‘Rey de Copas’ explicaron que, tras la violenta jornada, se pusieron en contacto directo con quienes estuvieron en ese sector del estadio. «Seguimos escuchando sus testimonios y nos estaremos comunicando con cada uno de ellos para brindarles asesoría legal y contención«, aseguraron.
Llamado a Testigos
Independiente pidió que quienes asistieron a esas tribunas revisen su correo y completen el formulario de contacto enviado por el club para poder recibir asistencia profesional. «En este momento tan duro para nuestra Institución, es importante que estemos todos juntos», concluye el comunicado, en el que la entidad de Avellaneda se compromete a acompañar a los socios afectados.
Tanto La U como Independiente tienen hasta este miércoles 27 de agosto para presentar sus pruebas sobre los graves desmanes ocurridos en el estadio Libertadores de América.
La reacción del club argentino llega luego de que se revelara el calvario que vivieron algunos de sus jugadores, como Loyola y Galdames, tras el escándalo del partido.
