En un lamentable incidente ocurrido en el terminal de buses de Valdivia, región de Los Ríos, un funcionario de la Seremi de Transportes fue agredido física y verbalmente por el conductor de un bus que realiza un recorrido frecuente entre Valdivia y la provincia del Ranco.
Según el relato del seremi de Transportes, Jean Pierre Ugarte, los fiscalizadores estaban desarrollando sus funciones de rutina cuando el chofer del bus se molestó e increpó a uno de los inspectores. En un video enviado a Radio Bío Bío, se observa cómo el conductor toma la ropa del fiscalizador y lo tira con fuerza, desestabilizándolo, para luego intentar golpearlo en el rostro, aunque no queda claro si concretó el ataque debido a la distancia del registro.
Autoridades prometen acciones legales
El hecho fue denunciado a Carabineros, quienes llegaron al lugar y trasladaron a ambos involucrados hasta la Primera Comisaría. El funcionario agredido constató lesiones en el Servicio de Alta Resolución (SAR) y le otorgaron 3 días de reposo.
Ugarte confirmó que existe una investigación interna en la Seremi de Transportes y que el equipo jurídico está analizando los antecedentes para evaluar el inicio de acciones legales. «Como Ministerio no vamos a permitir que este tipo de hechos se repita, porque los funcionarios cumplen un rol sumamente importante para garantizar que la locomoción colectiva traslade a sus pasajeros con todas las medidas de seguridad exigidas por la ley», afirmó el seremi.
Importancia de la labor de los fiscalizadores
Este incidente pone de manifiesto la necesidad de proteger y respaldar la labor de los funcionarios encargados de la fiscalización del transporte público. Ellos desempeñan una función crucial para velar por la seguridad y el cumplimiento de las normativas, lo cual beneficia directamente a los usuarios del sistema de locomoción colectiva.
Las autoridades han dejado claro que no tolerarán este tipo de agresiones y que tomarán las medidas legales correspondientes para sancionar a los responsables y enviar un mensaje claro de que la violencia contra los fiscalizadores no será aceptada.
Es fundamental que la ciudadanía comprenda y respete la importante labor que realizan estos funcionarios, y que se genere un ambiente de colaboración y respeto mutuo entre los usuarios del transporte público y quienes velan por su adecuado funcionamiento.