Durante años, el público ha especulado sobre los motivos que llevaron al quiebre de la amistad entre la comediante Natalia Valdebenito y el comunicador José Miguel Villouta. Ahora, Villouta ha roto finalmente su silencio, revelando una historia que va mucho más allá de una simple discusión en redes sociales.
Según Villouta, la ruptura de su amistad con Valdebenito no se debió a la polémica publicación que hizo en 2017, donde ironizó sobre el movimiento feminista chileno. De hecho, el comunicador afirma que el distanciamiento ocurrió por otros motivos que prefiere mantener en privado.
«Mi amistad con Valdebenito no se rompió por eso. Se rompió por lo que le pidió al director del Festival de Viña y que me contó en un café debajo de mi departamento la última vez que hablé con ella», explicó Villouta.
Según el comunicador, Valdebenito le habría solicitado al director del Festival de Viña «no ir a la gala» y «esa otra cosa», algo que Villouta no quiere revelar públicamente debido a los ataques que recibe. «Eso no creo que lo pueda contar jamás. No después de los ataques que recibo hoy. Ahí sí que como un cobarde me escondo», afirmó.
Pero Villouta no se detuvo ahí. También describió cómo ha percibido la evolución de Valdebenito, convirtiéndose en «una especie de Pancho Malo pero sin alma», refiriéndose a su creciente influencia política y capacidad de movilizar masas.
A pesar de los desencuentros, Villouta reconoce que «hay otros comediantes que lo saben», dando a entender que la situación entre él y Valdebenito no es un secreto en el mundo del espectáculo. «Así que, camina dando vergüenza. Todo siempre se sabe al final», concluyó.
La ruptura de esta amistad y la transformación de Natalia Valdebenito en una figura política de gran impacto han captado la atención del público, que ahora se pregunta qué más se esconde detrás de esta historia.