Los bomberos de La Serena y Coquimbo se mantienen en alerta ante el incremento de fugas de gas reportadas en jardines infantiles de la región. Según el superintendente del cuerpo de bomberos, Ángelo Pizarro, estas emergencias se deben a diversos factores, como la falta de capacitación o el mal manejo de sustancias dentro de los recintos educativos.
Pizarro explicó que existen dos tipos de situaciones de emergencia que han debido enfrentar: las relacionadas con gas licuado de petróleo, que pueden deberse a mala manipulación o robo de cañerías, y las que involucran gas sulfhídrico, generado por la descomposición de materia orgánica en los jardines.
Protocolos de Emergencia y Evacuación
Ante una fuga de gas licuado, Pizarro señaló que el protocolo establece la evacuación inmediata y la intervención de los bomberos con equipamiento especializado para detectar y controlar el origen de la fuga. Estos gases son altamente inflamables y pueden ser explosivos en altas concentraciones.
Por su parte, el director regional de la JUNJI, Marco Antonio Ávila, indicó que los jardines cuentan con protocolos de actuación y planes de seguridad para estar preparados ante emergencias como fugas de gas. Ante estos incidentes, suspenden las actividades de forma excepcional para proteger a los niños, y luego coordinan con las empresas proveedoras para solucionar el problema.
Medidas Preventivas y Certificaciones
Según Pablo Herrera Díaz, de Fundación Integra, todos los jardines infantiles de la región cuentan con el Sello Verde SEC y actualizan constantemente sus Planes Integrales de Seguridad Escolar (PISE), que incluyen protocolos de evacuación, simulacros y procedimientos de llamado a bomberos ante la detección de olores a gas.
Estas medidas preventivas y de preparación demuestran el compromiso de las autoridades y los centros educativos por garantizar la seguridad y el bienestar de los niños que asisten a estos jardines infantiles.
