En un giro inesperado en el caso del asesinato del empresario conocido como el «Rey de Meiggs», las autoridades chilenas han emitido una nueva alerta internacional de búsqueda, esta vez revelando la identidad real del sospechoso prófugo.
Inicialmente, el acusado había sido identificado como Osmar Ferrer, pero tras una exhaustiva investigación, se pudo establecer que su verdadero nombre es Carlos Alberto Mejía Hernández, de 18 años de edad. Según informes, Mejía Hernández ingresó de forma irregular al país, lo que dificultó la confirmación de su identidad desde un principio.
Liberación Polémica y Vínculos con el «Tren de Aragua»
La captura y posterior liberación de Mejía Hernández ha causado un verdadero terremoto en el sistema judicial chileno. Tras ser detenido junto a otros dos venezolanos por el asesinato del empresario José Felipe Reyes Ossa, el 10 de julio, Mejía Hernández fue puesto en prisión preventiva.
Sin embargo, en una cadena de eventos que aún se investiga, Mejía Hernández fue liberado al día siguiente, pese a que, según el Poder Judicial, se había informado a Gendarmería que el individuo debía permanecer encarcelado. Ahora, las autoridades sospechan que esta liberación irregular podría estar relacionada con los vínculos de Mejía Hernández con el Tren de Aragua, una peligrosa organización criminal venezolana.
Esfuerzos por Establecer la Identidad Real
Según informaron Carabineros y la PDI, cuando detuvieron a Mejía Hernández, este se identificó como Osmar Alexander Ferrer Ramírez. Sin embargo, tras diversas diligencias, se pudo establecer que este no era su nombre real, sino un alias utilizado para ocultar su verdadera identidad.
La nueva alerta internacional de búsqueda ahora incluye tanto el nombre real de Mejía Hernández como su supuesto alias, Osmar Ferrer, con el objetivo de facilitar su captura y extradición.
Implicaciones y Próximos Pasos
Este caso ha puesto en evidencia las fallas en el sistema judicial chileno y la necesidad de mejorar los procesos de identificación de sospechosos, especialmente cuando se trata de delincuentes extranjeros que ingresan al país de forma irregular.
Ahora, el fiscal regional Occidente, Marcos Pastén, trabaja junto a la PDI para determinar si la liberación de Mejía Hernández fue un error o si hubo una acción deliberada para provocar su fuga. La captura de este sospechoso se ha convertido en una prioridad para las autoridades, quienes buscan evitar que pueda escapar de la justicia.