El canciller Alberto van Klaveren ha hecho un llamado a respetar los procedimientos internos de Brasil en el proceso de extradición de Martín de Los Santos, el sospechoso de agredir a un conserje de 71 años. Van Klaveren, quien también es ministro de Relaciones Exteriores, expresó la satisfacción de Chile por la cooperación obtenida de las autoridades brasileñas, luego de que De Los Santos fuera detenido hace unos días en Cuiabá, Brasil.
Respecto a si el proceso sería más rápido si se decretara la expulsión del país del imputado, el canciller dejó claro que esa decisión le corresponde únicamente a las autoridades locales. «Hay que, obviamente, respetar los procedimientos internos. Cada país tiene su propio procedimiento en materia de extradición y también en materia de expulsión, y son atribuciones soberanas del respectivo país, y el país es el que decidirá», aseveró Van Klaveren.
Proceso de extradición en marcha
Según el fiscal jefe de Las Condes, Felipe Sepúlveda, la solicitud de extradición de Martín de Los Santos ya fue presentada y ahora debe ser revisada por la Corte de Apelaciones. De obtener la aprobación, el proceso pasará a la Cancillería chilena, que lo remitirá a su par en Brasil para su tramitación.
«La justicia brasileña va a definir soberanamente qué cautelar le impone si es que el proceso de extradición avanza, pero lo concreto es que el tribunal considera que, con los antecedentes que tenemos nosotros, estamos en condiciones de solicitar una medida cautelar en Brasil. Eso es lo que se resolvió hoy día», explicó Sepúlveda.
Posible condena de 3 a 5 años
El fiscal reiteró que desde el Ministerio Público lamentan no haber solicitado el arraigo del sospechoso, lo que habría impedido que De Los Santos viajara a Brasil. Sobre la posible pena que arriesga, Sepúlveda indicó que va «entre los tres y cinco años privado de libertad».
Por el momento, Martín de Los Santos permanece detenido en Brasil, y se espera que el proceso de extradición pueda extenderse por «varios meses», según lo señalado por el fiscal.
