En un duro golpe para las fuerzas rusas, el subcomandante de la Armada rusa, el general mayor Mikhail Gudkov, ha fallecido durante un ataque ucraniano en la región fronteriza de Kursk. Según informó el Ministerio de Defensa de Rusia, Gudkov, de 42 años, murió el 2 de julio mientras participaba en una «operación de combate» en la zona.
Gudkov, que nació en Siberia, era el encargado de las fuerzas costeras y terrestres de la Armada rusa. Oleg Kozhemaiko, gobernador de Primorie (Lejano Oriente ruso) donde sirvió el oficial, destacó que Gudkov «murió cumpliendo su deber de oficial junto a sus camaradas».
Un ataque devastador
Varios corresponsales de guerra confirmaron que Gudkov y hasta 10 oficiales más murieron en el bombardeo del puesto de mando de la infantería de marina en la localidad de Korenevo. Al parecer, el general coordinaba la labor de todos los marines de la Armada rusa cuando el puesto de mando fue alcanzado por «varios obuses enemigos».
Golpe a la moral rusa
La muerte de Gudkov, recientemente condecorado como Héroe de Rusia, supone un duro revés para la moral de las fuerzas rusas. Según informes, ciudadanos de Vladivostok, capital de Primorie, han depositado flores en el memorial al general en la plaza más céntrica de la ciudad portuaria.
Este no es el primer alto mando ruso que muere en la guerra de Ucrania. La prensa rusa ha informado este año sobre la muerte de tres generales y un vicealmirante, al menos dos de ellos en supuestos atentados con coches bomba organizados por Kiev.
La pérdida de Gudkov, un oficial experimentado y condecorado, representa un duro golpe para Rusia en su intento por mantener el control de la región fronteriza de Kursk.