Vera Florence Cooper Rubin fue una visionaria astrónoma estadounidense cuyo trabajo revolucionó nuestra comprensión del universo. Mejor conocida como Vera Rubin, ella proporcionó las primeras evidencias convincentes de la existencia de la materia oscura, un componente invisible que domina la composición de las galaxias y el cosmos.
Nacida en 1928 en Pensilvania, Rubin tuvo que luchar contra la discriminación de género que imperaba en la ciencia de su época. Cuando solicitó ingresar al programa de posgrado en astronomía de la Universidad de Princeton, le negaron la plaza alegando que «Princeton no acepta mujeres», una política que se mantuvo hasta 1975. Sin embargo, esto no detuvo a Rubin, quien finalmente obtuvo su doctorado en la Universidad de Georgetown en 1954.
Descubriendo la Materia Oscura
Colaborando con su colega Kent Ford, Rubin estudió el movimiento de las estrellas en más de 60 galaxias espirales. Sorprendentemente, descubrieron que las estrellas en los bordes exteriores de estas galaxias se movían a la misma velocidad que las del centro, algo que desafiaba las leyes de la física.
Rubin y Ford dedujeron que debe existir una enorme cantidad de materia invisible en estas regiones menos pobladas de estrellas visibles, lo que proporciona la fuerza gravitatoria necesaria para mantener a las estrellas orbitando a esa velocidad. Este hallazgo convenció a la comunidad astronómica de que al menos el 90% de la masa de las galaxias, y por lo tanto del universo observable, podría ser invisible, es decir, materia oscura.
El Observatorio Vera C. Rubin
En un homenaje póstumo a su legado, el Observatorio Vera C. Rubin, ubicado en el Cerro Pachón en Chile, acaba de comenzar sus operaciones. Este es el primer observatorio del mundo en llevar el nombre de una mujer astrónoma.
Durante los próximos 10 años, el Observatorio Vera C. Rubin realizará un mapeo sin precedentes del cielo visible, con el objetivo de comprender mejor la intrincada naturaleza de la materia oscura. Con su impresionante cámara, el observatorio ya ha captado alrededor de 10 millones de galaxias en solo unos días de observación, y se estima que en total podrá detectar hasta 20.000 millones de galaxias.
Además, el observatorio ha descubierto más de 2.000 asteroides que no habían sido identificados anteriormente en nuestro sistema solar, un logro que normalmente tomaría a los observatorios terrestres años de trabajo.
Sin duda, el Observatorio Vera C. Rubin marcará un hito en la exploración del cosmos, honrando el legado de una mujer cuyo trabajo visionario cambió para siempre nuestra comprensión del universo.