Debido a un preocupante deterioro de su salud, el exfrentista Mauricio Hernández Norambuena, conocido como el «Comandante Ramiro», fue trasladado desde el Complejo Penitenciario de Rancagua al Centro de Detención (CDP) Santiago Sur. El traslado, que involucró un importante despliegue de seguridad, se produjo la noche del miércoles.
Según fuentes de La Radio, Hernández Norambuena había bajado bruscamente 4 kilos de peso, lo que generó una alerta en el Ministerio de Salud por la gravedad de su condición. El traslado, que se concretó pasadas las 20:00 horas, contó con la participación de cuatro móviles y personal de la Unidad TAR y SOT de Gendarmería, además de un equipo GOPE de Carabineros que reforzó la operación.
Preocupación Familiar y Restricciones de Visitas
El traslado se produce después de que la familia de Hernández Norambuena emitiera una declaración pública el pasado fin de semana, expresando su preocupación por el estado de salud del exfrentista. Según la familia, desde hace semanas Hernández Norambuena presentaba síntomas como fiebre, sudoración, cansancio, desánimo, dolores musculares intensos y cólicos, sin que aún se hubiera determinado un diagnóstico certero.
Además, la familia denunció que Hernández Norambuena solo cuenta con dos días de visita por semana, con la posibilidad de recibir a una sola persona por hora. «Nos mantenemos en estado de alerta acerca de su situación», concluyó la declaración familiar.
¿Posible Indulto Presidencial?
Fuentes gubernamentales afirman que este traslado podría ser un escenario para llegar a un eventual indulto presidencial para el exfrentista. Cabe recordar que en junio, la defensa de Hernández Norambuena fracasó en su intento de anular una norma de Gendarmería que limitaba a 10 el número de visitas autorizadas.
La familia argumentó que esta restricción vulneraba la libertad personal de Hernández Norambuena y que, al residir en Valparaíso, los desplazamientos de más de dos horas y media para visitarlo «alteraban la situación jurídica preexistente, afectaban su dignidad y endurecían el régimen penitenciario».
Con este delicado estado de salud y el traslado a Santiago, las esperanzas de la familia se centran en que el Gobierno pueda considerar un eventual indulto presidencial para el «Comandante Ramiro».
