En una jugada sorpresiva, el Gobierno de Chile presentó observaciones para eliminar algunas disposiciones clave del proyecto que simplifica las regulaciones para invertir, el cual había sido aprobado previamente en el Congreso y estaba listo para ser promulgado. El veto del Presidente Gabriel Boric obligó a volver a discutir dos artículos fundamentales: el 22, que permitía inversiones en zonas de humedales con permiso técnico, y el 33, que habilitaba el uso de aguas subterráneas en áreas restringidas con autorización de la Dirección General de Aguas (DGA).
La oposición acusó al Gobierno de inconsistencia, tildando la medida como un retroceso para la reactivación económica. El diputado de Renovación Nacional, Frank Sauerbaum, apuntó que «el Gobierno no tiene un compromiso real con la generación de inversión, crecimiento, y las facilidades para terminar con la burocracia».
Gobierno Explica el Veto Presidencial
En la revisión del veto por parte de la Comisión de Hacienda de la Cámara, la subsecretaria de Hacienda, Heidi Berner, aseguró que las normas aprobadas generan preocupación sobre su impacto y proporcionalidad. «(…) Podría llevar a permitir alteraciones que comprometan la integridad de los humedales en caso no justificado«, advirtió.
Debate en el Congreso
Entre los temas en debate, el diputado UDI, Felipe Donoso, pidió rechazar las observaciones del Gobierno, advirtiendo que afectan obras como puentes y sistemas de agua. Por su parte, desde el Frente Amplio, su par Jaime Sáez cuestionó que la medida solo se discutiera en comisiones económicas, sin incluir a las de Medio Ambiente ni Recursos Hídricos.
Finalmente, la Comisión de Hacienda rechazó los vetos del Presidente Boric. Esto solo es una recomendación a la Sala, encargada de revisar el veto. Sin embargo, se proyecta que las observaciones del Ejecutivo serán aprobadas, ya que se necesitan 2/3 de votación para frenar la iniciativa.
Implicaciones y Perspectivas
Este episodio refleja la tensión entre los objetivos de agilizar las inversiones y la necesidad de proteger el medioambiente y los recursos hídricos. Desde una perspectiva económica, la oposición argumenta que las facilidades para invertir son clave para la reactivación. No obstante, el Gobierno expresa preocupación por los potenciales impactos ambientales de algunas de las disposiciones aprobadas.
En última instancia, la resolución de este debate tendrá implicaciones importantes para el equilibrio entre desarrollo económico y sostenibilidad ambiental en Chile. Será crucial que el Congreso logre una solución que satisfaga ambas prioridades de manera balanceada.
Conclusión
El Gobierno de Chile se enfrenta a un desafío delicado al intentar agilizar las inversiones, mientras que la oposición y algunos sectores del Ejecutivo expresan preocupaciones por los potenciales impactos ambientales. Este debate refleja la necesidad de encontrar un punto medio que fomente el crecimiento económico sin comprometer la integridad de los ecosistemas y recursos naturales del país.
