La derrota de la Selección Chilena ante Bolivia, la décima de estas Eliminatorias al Mundial 2026, acabó por sellar el fracaso del proceso de Ricardo Gareca al mando de La Roja. Tras apenas 13 partidos oficiales, el ‘Tigre’ cosechó un nefasto registro de ocho derrotas, cuatro empates y una solitaria victoria, lo que lo convierte en el peor técnico en la historia del combinado nacional con un rendimiento del 17,9%.
¿Pero en qué falló Gareca? ¿Cómo la ilusión que despertó en el país a comienzos de 2024 mutó en un desprecio generalizado hacia el estratega argentino? Analizar los números es sencillo, pero la realidad es que Gareca nunca debió llegar a la Selección Chilena.
Ignorar el Recambio Generacional
En Perú, Gareca supo aprovechar una base de jugadores con experiencia que aún podían aportar mucho a su equipo. Pero en Chile, el ‘Tigre’ se topó con una Generación Dorada que pedía a gritos un recambio, y no lo escuchó.
El técnico argentino recurrió a veteranos como Claudio Bravo, Mauricio Isla, Arturo Vidal, Alexis Sánchez y Eduardo Vargas, quienes, por obvias razones, dijeron que «sí» al llamado. Uno de los pocos que dijo «no» fue Charles Aránguiz, quien advirtió que «también estamos en tiempo de que deberíamos integrar gente más joven y darle minutos, darle experiencia».
Obstinación y Falta de Adaptación
Con 67 años, Gareca es un técnico a la antigua, terco y que no da su brazo a torcer. Y eso lo pagó Chile, con un entrenador obstinado que optó por convocar jugadores de su confianza, muchas veces cuestionados, para intentar reflotar una Selección que se hundía.
No hubo visitas a partidos de las ligas chilenas, tampoco seguimiento a los equipos juveniles de La Roja. El DT prefirió pasársela en Argentina y armar una lista por «tincada» cada vez que una fecha de Eliminatorias se acercaba. Su insistencia por nombres como Esteban Pavez, Igor Lichnovsky, Diego Valdés, Jean Meneses o Marcos Bolados es reflejo de lo anterior.
Planteamientos Fallidos y Quema de Jugadores
Gareca también quiso dar sus zarpazos en cancha, con resultados nefastos. Es cosa de recordar el paupérrimo 1-2 ante Bolivia en el Estadio Nacional, donde el estratega acabó «quemando» a Ben Brereton, Gabriel Arias, Matías Catalán o Erick Pulgar.
No solo para nombres fue testarudo Gareca, también lo fue con su planteamiento. Esquemas que jamás funcionaron, por más que afinó nombres y puestos, y que desnudaron que esta Selección Chilena jamás fue para él.
El Adiós del Peor Técnico en la Historia de La Roja
Al menos el peor entrenador en la historia de La Roja ya se fue. El ‘equipo de todos’ está por el suelo, siendo el hazmerreír de Sudamérica, y la ANFP no sabe cómo enmendar la situación. Gracias Ricardo Gareca por hundir aún más a una Selección que ya pedía a gritos un cambio de rumbo.