El nervio vago es una de las claves para una vida más larga y saludable. Este nervio fundamental controla funciones vitales como la digestión, el ritmo cardíaco y el sistema inmunológico. Ahora bien, ¿cómo puedes activarlo y aprovechar sus beneficios?
Según el neurocirujano e investigador Kevin Tracey, autor del libro The Great Nerve, existen 3 hábitos sencillos que pueden estimular el nervio vago y ayudarte a prevenir enfermedades crónicas relacionadas con la inflamación, como el cáncer, la diabetes o las afecciones cardíacas.
1. Duchas Frías
Tracey termina sus duchas diarias con agua fría durante 2-3 minutos. Esta exposición al frío activa inicialmente una respuesta de estrés en el cuerpo, pero luego parece poner en marcha el sistema parasimpático, lo que podría implicar la activación del nervio vago.
Aunque aún no hay pruebas definitivas de que esto reduzca la inflamación, sí existen indicios de que puede tener efectos positivos en el organismo.
2. Ejercicio Diario
El científico se ejercita entre 30 y 45 minutos, 5 veces a la semana. Su rutina combina ejercicios cardiovasculares, de fuerza, estiramientos y yoga.
Se sabe que el ejercicio regular mejora la salud cardíaca, metabólica y muscular, y podría también aumentar el tono vagal (el nivel de actividad del nervio vago), aunque este vínculo aún se está estudiando.
3. Meditación
Tracey medita alrededor de 10 minutos cada mañana, usando aplicaciones como Headspace.
Estudios iniciales indican que la meditación podría disminuir la presencia de marcadores inflamatorios en la sangre y, posiblemente, aumentar la actividad del nervio vago. Aunque aún no se ha comprobado este mecanismo con certeza, Tracey asegura que la meditación lo ha ayudado a ser más consciente y menos reactivo frente al estrés.
Aunque aún falta evidencia científica concluyente sobre métodos caseros para activar el nervio vago, estos 3 hábitos sencillos parecen tener efectos positivos en la salud a largo plazo. ¡Pruébalos y disfruta de una vida más larga y saludable!
