Recientemente, Jorge Rodríguez Cabello concluyó su periodo de tres años como presidente del Consejo Fiscal Autónomo (CFA). Este organismo técnico y consultivo, creado en 2019 para reemplazar al antiguo Consejo Fiscal Asesor, ha desempeñado un papel crucial en la supervisión de la política fiscal del país.
Durante su mandato, el CFA emitió reiterados informes advirtiendo al Ejecutivo sobre la necesidad de equilibrar las cuentas públicas ante un «considerable deterioro fiscal» permanente. Esto generó tensiones entre el organismo y el Gobierno, llegando incluso a un desencuentro inédito cuando el CFA planteó «pausar cambios a la meta de Balance Estructural» y llamó a concentrar esfuerzos en «ajustes significativos del gasto público».
Ante esta situación, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, argumentó que el manejo de la política fiscal es competencia del Ejecutivo, cuestionando que el CFA se pronunciara sobre algo que escaparía de sus atribuciones. Esta disputa generó reacciones de parlamentarios de diversos sectores, quienes advirtieron sobre la necesidad de recortar hasta 1.500 millones de dólares anuales y los riesgos de comprometer los pagos de la Pensión Garantizada Universal (PGU) si se sobrepasa el PIB tendencial.
Nuevos Desafíos para el Gobierno de Boric
Con la salida de Rodríguez del cargo, el vicepresidente Hermann González Bravo asumirá de manera interina la presidencia del CFA. En los próximos días, el Ministerio de Hacienda propondrá al Senado un nuevo nombre para integrar el Consejo, y finalmente será el presidente Gabriel Boric quien lo nombre oficialmente.
Esta transición representa una oportunidad para el Gobierno de Boric de nombrar a un líder que pueda ayudar a equilibrar las cuentas públicas y enfrentar los desafíos fiscales que enfrenta el país. El nuevo presidente del CFA deberá navegar en un entorno de tensión y desencuentros con el Ejecutivo, buscando un balance entre la independencia técnica del organismo y la necesidad de cooperación con el Gobierno.
Además, el próximo presidente del CFA deberá profundizar en el análisis de los problemas fiscales, proponer soluciones innovadoras y ampliar la perspectiva más allá de los recortes de gasto, explorando opciones de aumento de ingresos y reformas estructurales que permitan mejorar la sostenibilidad fiscal a largo plazo.
El Rol Clave del CFA
El Consejo Fiscal Autónomo desempeña un papel fundamental como organismo técnico y consultivo en materia fiscal y presupuestaria. Sus miembros, expertos de reconocido prestigio, tienen la responsabilidad de asesorar al Gobierno y monitorear el cumplimiento de las metas fiscales.
En un contexto de crecientes desafíos económicos y presiones políticas, el liderazgo del CFA será crucial para mantener la independencia y objetividad en el análisis de la situación fiscal, y para proponer soluciones equilibradas que protejan la inversión y el gasto social, al mismo tiempo que se busca la consolidación de las finanzas públicas.
El nombramiento del nuevo presidente del CFA por parte del presidente Boric será, sin duda, una decisión clave que marcará el rumbo de la política fiscal en los próximos años y determinará la capacidad del Gobierno para enfrentar los desafíos económicos que enfrenta el país.