La Cámara de Diputadas y Diputados ha dado un paso trascendental al aprobar el informe final de la Comisión Especial Investigadora sobre terapias hormonales a menores con disforia de género. Este documento, impulsado por parlamentarios de oposición, concluye con duras críticas al rol de diversos organismos del Estado y propone la suspensión de estos tratamientos en menores.
Según el informe, desde 2018 se han derivado más de 600 menores, incluyendo niños de tan solo 3 años de edad, desde el Programa de Acompañamiento a la Identidad de Género (PAIG) hacia tratamientos hormonales. Esto ha generado cuestionamientos sobre la legalidad de estas prácticas, especialmente cuando se han realizado sin el consentimiento de los padres.
Entre las recomendaciones clave del informe se encuentran:
Suspensión del Programa PAIG
El informe propone la suspensión inmediata del Programa PAIG, que ha sido el principal responsable de derivar a menores hacia terapias hormonales cuestionadas.
Prohibición de Terapias Hormonales y Quirúrgicas a Menores
Se solicita la prohibición de cualquier terapia hormonal o quirúrgica relacionada con la disforia de género en menores de edad, hasta que se realice una revisión exhaustiva de los protocolos y se cuente con evidencia científica sólida que respalde su seguridad y efectividad.
Auditoría a Instituciones Públicas Involucradas
El informe exige una auditoría a las instituciones públicas que han participado en la implementación de estos programas, con el fin de determinar responsabilidades y garantizar la protección de los menores.
Revisión Integral de Protocolos del Ministerio de Salud
Se solicita una revisión exhaustiva de los protocolos del Ministerio de Salud relacionados con la atención de menores con disforia de género, para asegurar que se ajusten a las mejores prácticas y evidencia científica disponible.
Diputados de oposición han celebrado la aprobación de este informe, calificándolo como un «día histórico» en la protección de los niños, niñas y adolescentes. Consideran que estas terapias han sido aplicadas de manera «inescrupulosa» y sin el respaldo científico adecuado, poniendo en riesgo la integridad de los menores.
La diputada Catalina del Real ha señalado que «el Estado de Chile ha estado experimentando con nuestros hijos, con nuestros niños. En vez de dar un acompañamiento neutro está induciendo a unas terapias que realmente inciden en la salud y también en la salud mental de todos esos niños y niñas».
Este informe representa un importante paso hacia la protección de los derechos y el bienestar de los menores con disforia de género en Chile. Ahora, las autoridades deberán actuar con celeridad para implementar las recomendaciones y garantizar que se respeten los principios éticos y científicos en la atención de esta población vulnerable.