El domingo 11 de mayo, Lisandra Silva y Raúl Peralta celebraron un momento especial: el tercer cumpleaños de su hija Leiah. Esta celebración, enmarcada también por el Día de la Madre, se convirtió en una jornada llena de emociones y recuerdos para la familia.
La influencer y modelo cubana Lisandra Silva compartió con entusiasmo los detalles de la fiesta de Leiah a través de su cuenta de Instagram, donde cuenta con más de 2 millones de seguidores. La decoración de la celebración estuvo inspirada en la película favorita de Leiah, La Sirenita, con motivos marinos y colores pastel que le dieron un toque mágico al evento.
En su publicación, Lisandra expresó su amor y admiración por su hija, describiéndola como un alma bella y pura, curiosa, intuitiva, delicada y gentil
. Destacó la personalidad generosa, imaginativa y cariñosa de Leiah, y agradeció a Raúl Peralta por ser tan lindo papá
.
Una Colaboración Ejemplar
A pesar de que Lisandra Silva y Raúl Peralta ya no mantienen una relación sentimental, han demostrado una madurez y compromiso ejemplares en la crianza de sus hijos. Ambos continúan involucrados activamente en la vida de Leiah y su hermano mayor, Noah, priorizando el bienestar y la felicidad de sus pequeños.
La publicación de Lisandra fue ampliamente celebrada por sus seguidores, quienes destacaron la armonía y el ambiente lleno de amor que rodeó la fiesta de cumpleaños de Leiah. Esta celebración se convirtió en un testimonio de que, incluso después de una separación, el amor y la colaboración pueden prevalecer cuando se trata del crecimiento y desarrollo de los hijos.
Un Día Especial para una Niña Especial
El nacimiento de Leiah coincidió con el Día de la Madre, lo que convirtió esta fecha en un evento aún más significativo para Lisandra. En sus palabras, Leiah ya estaba pensando en darme el mejor regalo
incluso antes de nacer, demostrando la conexión profunda que existe entre madre e hija.
Sin duda, esta celebración de cumpleaños fue una jornada llena de amor, recuerdos y agradecimiento para Lisandra Silva y Raúl Peralta, quienes han sabido mantener una relación cordial y colaborativa en beneficio de sus hijos. La fiesta de Leiah se convirtió en un ejemplo de cómo el amor y la unión familiar pueden prevalecer incluso en momentos de cambio y transición.
