Un terremoto de magnitud 5.3 sacudió la región de Magallanes y la Antártica Chilena el lunes 12 de mayo de 2025, a las 20:47 horas. Según el Centro Sismológico Nacional, el epicentro se ubicó a 55.32 km al noreste de Puerto Natales, con una profundidad de 28.3 km.
La Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública (ONEMI) clasificó el evento como de «mediana intensidad», registrando grados IV y V en la escala de Mercalli en localidades como Torres del Paine, Puerto Natales, Río Verde y Laguna Blanca.
Descartado riesgo de tsunami
Pese a la magnitud del sismo, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) indicó que no existen las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile. La Unidad de Alerta Temprana de ONEMI mantiene un monitoreo permanente en la región.
Evaluación de daños y respuesta de emergencia
ONEMI señaló que se encuentra evaluando los posibles daños a personas, infraestructura y servicios básicos en la zona afectada. Hasta el momento, no se han reportado víctimas ni alteraciones graves en los servicios esenciales.
Las autoridades regionales y locales han activado los protocolos de emergencia para atender cualquier eventualidad y brindar asistencia a la población. Además, se han desplegado equipos de evaluación y respuesta para determinar el alcance del impacto y coordinar las acciones necesarias.
Preparación y resiliencia de la región
La región de Magallanes y la Antártica Chilena es una zona históricamente propensa a la actividad sísmica. Las autoridades y la comunidad han trabajado en fortalecer la preparación y resiliencia ante este tipo de eventos.
«Hemos implementado planes de emergencia, capacitado a la población y mejorado la infraestructura crítica para estar mejor preparados ante sismos y tsunamis. Esto nos permite responder de manera más efectiva y minimizar los impactos»
, explicó el gobernador regional.
Los expertos destacan que la rápida respuesta y coordinación de las entidades involucradas han sido clave para mantener la calma y evitar mayores consecuencias en esta ocasión. Sin embargo, subrayan la importancia de continuar trabajando en la prevención y mitigación de riesgos a largo plazo.