Pakistán ha autorizado a sus Fuerzas Armadas a tomar una respuesta apropiada ante los recientes ataques aéreos perpetrados por India en territorio paquistaní. Esto se decidió en una reunión del Comité de Seguridad Nacional (NSC), presidida por el primer ministro Shehbaz Sharif.
Según el comunicado de la oficina del primer ministro, los ataques indios causaron la muerte de 26 civiles inocentes y violaron flagrantemente la soberanía de Pakistán. El NSC consideró estos acontecimientos como un «acto de guerra no provocado, cobarde e ilegal» por parte de India.
Pakistán afirma que los ataques aéreos indios afectaron a objetivos civiles, económicos y militares en varias regiones, incluyendo el Proyecto Hidroeléctrico Neelum-Jhelum, en violación de convenios internacionales. Además, pusieron en grave peligro a aerolíneas comerciales de países del Golfo Pérsico, arriesgando la vida de miles de pasajeros.
Pakistán se reserva el derecho de responder, en legítima defensa, en el momento, lugar y forma que considere apropiados, para vengar la pérdida de vidas inocentes paquistaníes y la violación flagrante de su soberanía.
El comunicado también rechaza las acusaciones de India sobre la existencia de campamentos terroristas en territorio paquistaní, calificándolas de «carentes de toda moralidad» y destinadas a «satisfacer sus delirios y objetivos políticos de corto plazo».
Llamado a la Comunidad Internacional
Pakistán ha exigido a la comunidad internacional que reconozca la gravedad de las «acciones ilegales no provocadas de la India» y la haga responsable de sus «flagrantes violaciones de normas y leyes internacionales».
La escalada de tensión entre India y Pakistán se ha intensificado después de que Nueva Delhi acusara a Islamabad de estar detrás de un ataque en Cachemira que dejó 26 civiles muertos, en su mayoría turistas indios.
Respuesta Firme y Legítima Defensa
Ante esta situación, Pakistán ha dejado claro que no tolerará ni aceptará los ataques a su población civil. El país se ha reservado el derecho de responder de manera apropiada y en legítima defensa, con el objetivo de vengar la pérdida de vidas inocentes y defender su soberanía.
La responsabilidad de las consecuencias de esta escalada recaerá exclusivamente sobre India, según el comunicado del gobierno paquistaní.
