La República Democrática del Congo (RDC) se enfrenta a una nueva tragedia en sus vías fluviales, luego de que una embarcación se incendiara y naufragara en el río Congo, dejando un saldo devastador de al menos 148 personas fallecidas y cientos más desaparecidas o heridas.
Según las autoridades regionales, el accidente ocurrió el pasado 15 de abril en la provincia de Ecuador, al noroeste del país. La embarcación, de madera y aparentemente sobrecargada de combustible, se incendió mientras navegaba por el caudaloso río Congo, provocando que se hundiera rápidamente.
Una Tragedia Anunciada en las Vías Fluviales de la RDC
Lamentablemente, los accidentes de barcos son relativamente comunes en la RDC, donde los ríos y lagos se utilizan a diario como principal medio de transporte, debido a la falta de infraestructura y la densa selva que cubre gran parte del país.
Olive Lomo, presidente de la sociedad civil de Mbandaka, la ciudad más cercana al lugar del siniestro, explicó a EFE que «en este momento, hablamos de 148 muertos, 100 desaparecidos y 150 supervivientes». Según las primeras investigaciones, el incendio se habría originado por una mala carga de los bidones de combustible a bordo.
Rescate y Recuperación de Víctimas
El jefe de la Comisión Fluvial de Ecuador, Compétent Mboyo, informó que el viernes se recuperaron 11 cadáveres más, y que los cuerpos siguen apareciendo a la superficie, lo que dificulta tener un recuento preciso de las víctimas.
Muchos de los sobrevivientes han sido trasladados al Hospital General de Wangata, en Mbandaka, para recibir atención médica. Lamentablemente, esta no es la primera tragedia de este tipo en la región, ya que la semana pasada otro naufragio en la misma zona dejó 72 víctimas fatales.
Llamado a Mejorar la Seguridad en el Transporte Fluvial
Estos accidentes ponen de manifiesto la urgente necesidad de mejorar las condiciones de seguridad en el transporte fluvial de la RDC. Las embarcaciones a menudo son precarias, viajan sobrecargadas y la señalización es casi inexistente, lo que aumenta exponencialmente los riesgos para los pasajeros.
Las autoridades locales y el gobierno central deben tomar medidas decisivas para regular y modernizar el transporte fluvial, con el fin de evitar que más familias sufran estas devastadoras tragedias en el futuro.
