La tranquila ciudad de Santo Domingo, República Dominicana, se vio sacudida por una tragedia sin precedentes en la madrugada del martes. El techo de la concurrida discoteca Jet Set, conocida por sus animadas fiestas de los lunes, se desplomó sobre los asistentes, dejando un saldo de 27 personas fallecidas y más de 150 heridos.
Según los últimos reportes del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), los equipos de rescate han trabajado sin descanso para sacar a los sobrevivientes de entre los escombros. El director del COE, general Juan Manuel Méndez, informó que se han realizado 134 traslados a centros médicos, donde los pacientes reciben atención urgente.
La discoteca, que en el momento del siniestro albergaba a un gran número de personas, entre ellas el popular merenguero Rubby Pérez, se convirtió en un escenario de dolor y desesperación. «Todos los organismos de socorro han brindado la asistencia necesaria y están trabajando incansablemente en las labores de rescate»
, declaró el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, quien acudió al lugar junto a su esposa y varios ministros para expresar su solidaridad con las víctimas y sus familias.
Una Tragedia que Conmociona a la Nación
La noticia del derrumbe de la discoteca Jet Set ha sacudido a la opinión pública dominicana, que se encuentra en shock por la magnitud de la tragedia. Entre las víctimas mortales se encuentra la gobernadora de la provincia de Montecristi, Nelsy Cruz, cuyo fallecimiento ha sido confirmado por las autoridades.
Las labores de rescate y asistencia médica continúan en el lugar, con la participación de decenas de ambulancias, unidades del COE, la Policía Nacional, el Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1, Bomberos, Defensa Civil y el Ministerio de Defensa. Más de 200 socorristas trabajan sin descanso para encontrar a todas las personas afectadas y brindarles la ayuda necesaria.
Familiares Angustiados Buscan Noticias de sus Seres Queridos
Alrededor de la discoteca, se han congregado numerosos familiares de las personas que se encontraban en el interior en el momento del derrumbe, desesperados por conocer el paradero y el estado de sus seres queridos. La incertidumbre y la angustia se palpan en el ambiente, mientras las autoridades continúan con las labores de rescate y atención a las víctimas.
Esta tragedia ha conmocionado a la nación dominicana, que se encuentra en duelo por la pérdida de vidas y el sufrimiento de las familias afectadas. Las autoridades han prometido investigar a fondo las causas del derrumbe y garantizar que se tomen las medidas necesarias para evitar que este tipo de incidentes vuelvan a ocurrir en el futuro.
