En un nuevo capítulo de la interminable espiral de violencia entre Israel y Palestina, los ataques aéreos y de artillería del ejército israelí en la Franja de Gaza han cobrado la vida de más de 50 palestinos en las últimas 24 horas. Según informes del Ministerio de Salud de Gaza, además de los 56 fallecidos, otros 137 palestinos resultaron heridos en los bombardeos que azotaron diferentes puntos del enclave.
La mayoría de las víctimas son mujeres y niños, lo que ha generado una ola de indignación y condena internacional ante la desproporcionada respuesta militar israelí. Desde el inicio de la actual ofensiva, la cifra total de muertos en Gaza asciende a 50.752, con más de 115.475 heridos, según las últimas estadísticas oficiales.
Ataques indiscriminados en todo el territorio
Los ataques israelíes se concentraron en varias zonas de la Franja de Gaza, sin distinción entre objetivos militares y civiles. En el norte, la artillería israelí golpeó el barrio de Abed Rabbo en Yabalia, donde cuatro personas perdieron la vida. En la Ciudad de Gaza, un ataque aéreo contra una vivienda familiar mató a un padre y a su hija en el barrio de Zeitún, mientras que en Shujaiya otras diez personas murieron en otro bombardeo.
«Es una tragedia que se repite una y otra vez. Israel está atacando indiscriminadamente a la población civil, sin respetar las leyes de la guerra. Exigimos el fin inmediato de esta ofensiva y que se respeten los derechos humanos»
– Portavoz del Gobierno de Gaza.
Devastación en el sur de Gaza
Fue en el sur de la Franja de Gaza donde se registró el mayor número de víctimas, con cerca de 25 palestinos muertos. Los ataques israelíes se ensañaron particularmente contra la ciudad de Jan Yunis, donde al menos dos niños perdieron la vida bajo los bombardeos contra sus hogares.
Además, Israel volvió a atacar las zonas de desplazados en Mawasi, al oeste de Jan Yunis, a pesar de que las autoridades habían asegurado que estas eran «zonas seguras» para la población civil. Esto ha generado un nuevo éxodo de familias que huyen desesperadamente de la violencia.
Llamado urgente al cese de hostilidades
Ante esta nueva escalada de violencia, el Gobierno de Gaza, liderado por Hamás, ha exigido el fin inmediato de la ofensiva israelí y el respeto a los derechos humanos de la población palestina. Asimismo, han denunciado que cerca de 500 niños han perdido la vida desde que Israel rompiera el alto el fuego el pasado 18 de marzo.
La comunidad internacional ha condenado enérgicamente estos ataques y ha hecho un llamado urgente a ambas partes para que restablezcan el diálogo y busquen una solución pacífica al conflicto. Sin embargo, la espiral de violencia parece lejos de detenerse, dejando un saldo cada vez más devastador entre la población civil.