El Paris Saint-Germain (PSG) ha vuelto a demostrar su dominio absoluto en el fútbol francés al consagrarse como campeón de la Ligue 1 una vez más. Tras una victoria por 1-0 sobre el Angers, con un gol de Désiré Doué, el conjunto parisino ha certificado su hegemonía en el campeonato local, cumpliendo con el mínimo exigible en los últimos años.
De hecho, en las últimas 13 temporadas, el PSG ha levantado 11 títulos de Ligue 1, una cifra que refleja su aplastante superioridad en el ámbito nacional. Sólo el Lille, en la temporada 2020/2021, y el Mónaco, en el 2016/2017, han logrado interrumpir este dominio del equipo parisino.
Una Tradición de Victorias
Para el PSG, ganar la Ligue 1 se ha convertido casi en una tradición. En esta ocasión, el conjunto dirigido por Luis Enrique se aseguró el título con un empate, a siete jornadas del final de la temporada, dejando atrás a rivales como el Mónaco y el Marsella.
Incluso, el técnico español se dio el lujo de dar descanso a algunos de sus jugadores clave pensando en el próximo duelo de Champions League ante el Aston Villa. Ante un rival claramente inferior como el Angers, el PSG no tuvo que esforzarse demasiado para conseguir la victoria.
Preparándose para el Reto de la Champions
Con este nuevo título de Ligue 1 en el bolsillo, el PSG ahora se enfoca en su gran objetivo: la Champions League. Tras eliminar al Aston Villa en cuartos de final, el equipo parisino se medirá al Real Madrid o al Arsenal en semifinales, con la ilusión de llegar a la final y convertirse en un auténtico mito del club francés.
El quinto título de Luis Enrique al frente del PSG, sumado a la Supercopa y la Copa de Francia conquistadas en su primera temporada, lo convierten en un entrenador clave para el proyecto del club. Ahora, el reto es dar el salto definitivo en Europa y consagrarse como el mejor equipo del continente.
Es el quinto título de Luis Enrique en el PSG y puede calcar lo que consiguió en su curso inaugural en el club parisino.
El dominio del PSG en Francia parece inquebrantable, pero su verdadero desafío será demostrar su poderío a nivel internacional. Con un plantel de estrellas y un entrenador experimentado, el conjunto parisino tiene todas las herramientas para convertirse en el nuevo rey de Europa.