El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) ha estimado que el terremoto que sacudió Birmania este viernes dejó cientos de fallecidos. Según las mediciones del USGS, el epicentro del sismo se ubicó a 10 kilómetros de profundidad, a unos 17 kilómetros de Mandalay, la segunda ciudad más poblada del país con 1,2 millones de habitantes.
La agencia señaló que existe una «alerta naranja por muertes y pérdidas económicas relacionadas con el temblor», y que la cifra de víctimas mortales podría estar entre 100 y 1.000 personas. Además, el USGS indica que 7.000 personas han estado expuestas a «sacudidas violentas», 2,8 millones a «sacudidas profundas» y más de 10 millones a «sacudidas fuertes o muy fuertes».
Daños Generalizados y Esfuerzos de Rescate
Según fuentes humanitarias en el terreno, muchos edificios se derrumbaron en Mandalay, mientras que un monasterio también quedó destruido en la ciudad de Taungoo, con 20 niños atrapados en su interior. En la localidad de Sagaing, un puente quedó completamente hundido.
Los efectos del sismo también se sintieron con fuerza en Rangún, la principal ciudad de Birmania, donde numerosos edificios tuvieron que ser evacuados. «Es probable que se produzcan víctimas y daños considerables, y el desastre podría ser generalizado. Las alertas naranja anteriores han requerido una respuesta a nivel regional o nacional»
, advirtió el USGS.
Esfuerzos de Rescate y Asistencia Humanitaria
Los equipos de rescate se encuentran trabajando arduamente en la búsqueda de sobrevivientes entre los escombros. Además, las autoridades y organizaciones humanitarias han activado planes de emergencia para brindar asistencia médica, albergue y suministros a las comunidades afectadas.
El Gobierno de Birmania ha declarado el estado de emergencia y solicitado ayuda internacional para hacer frente a esta crisis de proporciones regionales. Expertos en gestión de desastres y especialistas en reconstrucción se han movilizado para evaluar los daños y coordinar los esfuerzos de recuperación a largo plazo.
Este devastador terremoto ha dejado una estela de destrucción y sufrimiento en Birmania, y las autoridades y la comunidad internacional se enfrentan al reto de brindar una respuesta efectiva y oportuna para salvar vidas y reconstruir las zonas afectadas.