Justin Timberlake, el artista que saltó a la fama como parte del grupo N Sync, cumplió con una deuda pendiente con sus fanáticos chilenos al presentarse por primera vez en un escenario de nuestro país. Su esperado show en el Lollapalooza Chile fue el broche de oro de la jornada sabatina del festival.
Luego de la exitosa actuación de Alanis Morissette, llegó el turno de Timberlake, quien cautivó al público presente en el Cenco Malls Stage del Parque Cerrillos. Abriendo con su éxito Mirrors, el oriundo de Memphis rápidamente se ganó a la multitud, en su mayoría adultos jóvenes que crecieron escuchando su música a finales de los noventa.
Con su característico carisma y energía, el estadounidense recorrió el escenario ofreciendo lo mejor de su repertorio, deleitando a los asistentes con temas como Cry Me a River, Rock Your Body y la infaltable Can’t Stop the Feeling!. Fue así como Timberlake transformó la explanada principal en una fiesta pop de MTV, satisfaciendo a quienes habían esperado por casi 30 años para verlo por primera vez en Chile.
Pero el show de Timberlake no se limitó solo a su impresionante despliegue vocal y coreográfico. En un momento emotivo, el artista incluso dejó caer unas lágrimas ante la tremenda recepción de parte de sus seguidores, demostrando su conexión genuina con el público.
Durante una hora y media, el intérprete selló su debut en estas tierras como parte de la gira The Forget Tomorrow Tour, con la que promociona su sexto álbum de estudio, ‘Everything I Thought It Was’. Fue un espectáculo redondo que cumplió con las expectativas depositadas en el músico de 44 años, quien demostró mantenerse vigente y relevante en la escena musical.
Para el cierre del Lollapalooza Chile, que se realizará este domingo, se presentarán artistas como Tool, Shawn Mendes, Teddy Swims, Lucybell, Los Tres, Cancamusa, Tate Mcrae, Zedd, The Marías, Inhaler, Sepultura, Wave To Earth y Artemas, Dillom, entre otros.