En una batalla por preservar el patrimonio y la identidad de Valparaíso, el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago ha declarado admisible una demanda presentada contra el Gobierno Regional y la Municipalidad de Valparaíso. La demanda, impulsada por el diputado Andrés Celis, busca que las autoridades reconozcan el daño ambiental causado por el deterioro y abandono de ocho ascensores patrimoniales de la ciudad.
Estos ascensores históricos -Artillería, Villaseca, Florida, Mariposas, Lecheros, Monjas, Larraín y Polanco- han sido testigos del paso del tiempo y forman parte integral de la identidad y tradición porteña. Sin embargo, años de falta de mantenimiento y operación han dejado a estos íconos en un estado lamentable, privando a los habitantes de Valparaíso de este vital medio de transporte.
El tribunal ha solicitado a la Dirección Regional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas un informe sobre el estado de ejecución de los programas de mantenimiento y recuperación de los ascensores afectados. Esto marca un hito, ya que por primera vez el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago abordará esta problemática que aqueja a los vecinos de los cerros de Valparaíso.
Según el diputado Andrés Celis, la denuncia surge de una petición de años de los propios residentes, quienes buscan preservar las tradiciones porteñas y recuperar estos emblemáticos ascensores. «La recuperación de este medio de transporte es a lo que mismo que apuntó el presidente de la agrupación de usuarios y usuarias de ascensores de Valparaíso, César Andrade, deseando que esta demanda ambiental tenga un resultado positivo.»
Responsabilidad Compartida
Por su parte, el gobernador de la región de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, ha aclarado que la responsabilidad de mantener estos ascensores en buen estado recae en el Ministerio de Obras Públicas. Sin embargo, en diciembre pasado, Mundaca ofició a la ministra Jessica López para que informara sobre la puesta en marcha de los ascensores que actualmente no están funcionando.
Esta demanda ambiental representa un esfuerzo conjunto de la comunidad, los representantes políticos y las autoridades regionales y nacionales para recuperar y preservar un legado que define la identidad de Valparaíso. Al resolver esta situación, se podrá devolver a los habitantes de los cerros porteños el acceso a este emblemático medio de transporte, fortaleciendo la tradición y el sentido de pertenencia de la ciudad.