La Dirección de Educación Municipal (DEM) de Santiago ha denunciado un incidente violento ocurrido este jueves en el Instituto Nacional, donde una inspectora del establecimiento fue agredida cobardemente por un estudiante. Este hecho se suma a otros disturbios registrados en el recinto durante la mañana, cuando un grupo de al menos cinco personas, aparentemente ajenas al instituto, ingresaron al patio.
Según la DEM, la inspectora agredida fue trasladada a un centro asistencial por personal de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) para recibir atención médica. Además, se detectó la presencia de una persona ajena al Instituto Nacional en el lugar, lo que llevará a la DEM a evaluar la presentación de acciones legales.
En respuesta a estos hechos, la DEM ha anunciado que recurrirá a la Ley de Aula Segura para actuar contra los responsables del ataque. Esta ley, promulgada en 2018, permite a los establecimientos educacionales tomar medidas disciplinarias y legales ante situaciones de violencia que afecten el normal desarrollo de las actividades escolares.
Garantizar la Seguridad Escolar, un Desafío Prioritario
La DEM ha manifestado su determinación de buscar a los responsables que se esconden detrás de disfraces u overoles para actuar con cobardía, atentando contra el derecho de los niños y jóvenes a estudiar en un ambiente adecuado y agrediendo a quienes buscan el bienestar de los estudiantes.
Este incidente se produce en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en los establecimientos educacionales. En los últimos años, se han registrado diversos episodios de violencia y disturbios en liceos y colegios, lo que ha llevado a las autoridades a implementar medidas para garantizar un entorno seguro y propicio para el aprendizaje.
Acciones Necesarias para Prevenir la Violencia Escolar
Expertos en el tema señalan que, además de la aplicación de la Ley de Aula Segura, es fundamental fortalecer los programas de convivencia escolar, capacitar al personal docente y de seguridad, e involucrar a las familias y la comunidad en la promoción de una cultura de paz y respeto dentro de los establecimientos educacionales.
Solo a través de un abordaje integral y la colaboración de todos los actores involucrados, se podrá garantizar que los estudiantes puedan desarrollar sus actividades académicas en un ambiente seguro y propicio para su desarrollo. La seguridad escolar debe ser una prioridad para asegurar el derecho a la educación de niños y jóvenes.
