En la pequeña localidad de Lincoln Heights, Ohio, una comunidad afroamericana se ha unido para hacer frente a las amenazas de grupos neonazis que han aterrorizado a sus residentes. Ante la falta de una respuesta efectiva de las autoridades, los padres han decidido tomar medidas por su propia cuenta, creando una milicia comunitaria armada para escoltar a sus hijos hasta la escuela.
Seguridad y Vigilancia: La Respuesta de la Comunidad
Casi todas las mañanas, Jay, cuyo nombre real prefiere mantener en reserva, se levanta antes del amanecer para patrullar los alrededores de Lincoln Heights y asegurarse de que los niños lleguen sanos y salvos a la escuela. «Somos una comunidad muy unida, así que todos nuestros niños nos conocen», explica Jay, miembro del programa de «Seguridad y Vigilancia» de la localidad.
Este programa, conformado por voluntarios armados de la comunidad, surgió después de que un grupo de neonazis ondeara banderas con esvásticas y gritara insultos racistas en las afueras de Lincoln Heights, un pueblo donde casi el 96% de los residentes son afroamericanos. A pesar de la presencia de las fuerzas del orden, no se realizaron arrestos ni controles de identidad a los alborotadores, lo que llevó a los habitantes a tomar medidas por su cuenta.
Fortaleciendo los Lazos Comunitarios
Daronce Daniels, portavoz del grupo de residentes armados, afirma que este incidente «confirmó» a los habitantes que «no estarán protegidos si otro grupo de odio visita la ciudad». Sin embargo, lejos de generar división, esta iniciativa ha fortalecido los lazos entre los miembros de la comunidad.
«Nunca me he sentido más seguro como hombre negro en mi comunidad que ahora. Estos son mis amigos, mis primos, mis hermanos, mis hermanas, mis tías»
, expresa Daniels a NBC News.
Otros vecinos, como el empresario local Eric Ruffin, quien también fue abordado por neonazis, apoyan la labor de la milicia comunitaria, aunque admiten que desearían que no fuera necesaria. «Lo que no entiendo es cómo puedo estar aquí en Estados Unidos en 2025 y que alguien se acerque a mi ventana con una esvástica, portando armas, me llame con la palabra que empieza con N y la fuerza policial sólo mire», manifiesta Ruffin.
Seguridad y Unidad en Lincoln Heights
A pesar de las preocupaciones de la sheriff del Condado de Hamilton, Charmaine McGuffey, sobre los posibles riesgos de un enfrentamiento armado, los residentes de Lincoln Heights se sienten más seguros gracias a la presencia de la milicia comunitaria. «Siento que ahora es más seguro», menciona Chantelle Phillips, una de las madres de la localidad. «Sé que mi hijo puede caminar a casa y estar bien».
La iniciativa de «Seguridad y Vigilancia» en Lincoln Heights demuestra cómo una comunidad unida puede hacer frente a las amenazas del odio y la discriminación, fortaleciendo los lazos entre sus miembros y brindando un sentimiento de seguridad y pertenencia.
